Piden ayuda ciudadana para frenar la «mala fe» con que actúan los pirómanos

Salamanca- Colaboración ciudadana y mano dura contra las pirómanos. Esto es lo que demanda el Gobierno que preside Juan Vicente Herrera para hacer frente a una de las principales lacras que padece Castilla y León, sobre todo en la época estival.
La vicepresidenta primera y consejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz, explicó que el fuego «provocado» que se inició en la madrugada del pasado 30 de julio en la localidad salmantina de Villarino de los Aires sufrió hasta tres nuevos repuntes después de estar controlado en un primer momento, «todos ellos provocados», hasta arrasar aproximadamente 1.050 hectáreas en los Arribes del Duero.
Asimismo, declaró que «aunque están todavía cerrándose los datos finales de perimetración, hay que recordar el grave riesgo al que se vieron comprometidos municipios como Villarino». María Jesús Ruiz indicó que esta acción «invita a una reflexión: más allá de la importante pérdida de la masa forestal y lo que eso supone para la generación actual y las futuras, está el grave riesgo en que se pone la seguridad de las personas y de los bienes, en una acción absolutamente injustificable».
La vicepresidenta criticó «la mala fe y la intención criminal de personas que sistemáticamente están provocando este tipo de situaciones, a las que después se une la meteorología concreta, con vientos muy importantes de entre 20 y 25 kilómetros por hora en esa zona, que han contribuido a la propagación de las llamas».
En esta misma línea, el delegado de la Junta en Salamanca, Agustín de Vega, pidió a los ciudadanos que delaten a los pirómanos porque cree que hay «una mano detrás» de la mayoría de los incendios forestales que se dan en la Región.
Rapidez y eficacia
Además, destacó que el operativo de Villarino actuó «con rapidez, eficacia y coordinación», que evitó que el fuego arrasara mucho más terreno. Agustín de Vega señaló que todo apunto a que en el fuego hay «una mano detrás» dado que en el lugar en el que se originó era una zona «inhóspita», no se registraron tormentas secas, la temperatura en el momento del inicio no era alta y casi un día después se reprodujo en diferentes lugares.
El delegado territorial agradeció la colaboración de los vecinos en las tareas de extinción de incendios forestales.