Campanario busca el indulto

En vísperas de su cita con los tribunales, Campanario aseguró a LA RAZÓN que tiene «la conciencia tranquila». La esposa del diestro Jesulín de Ubrique es la más mediática de los imputados y se sentará ante el juez como si saliese al ruedo: ya hay acreditados 85 periodistas de 38 medios de comunicación distintos para seguir de cerca el proceso y ella será el principal objetivo de las cámaras.

La «operación Karlos» se destapó en 2006 y con ella se desmanteló una red que tramitaba informes médicos falsos para conseguir pensiones de invalidez. Cinco años después, un total de 30 imputados se sentarán en el banquillo de los acusados por la Fiscalía, la Seguridad Social y la Junta de Andalucía. El fiscal del caso, Juan Bosco, lleva a 24 de los procesados y ya ha llegado a acuerdos con más de la mitad.

La condición para el pacto es que los imputados admitan su culpabilidad; a cambio, conseguirían librarse del ingreso en prisión al ser condenados con penas inferiores a dos años. Asimismo, el Ministerio Público les ha solicitado que paguen a la Seguridad Social las indemnizaciones previstas en el escrito de acusación provisional.

Escuchas telefónicas
Bosco también se reserva la posiblidad de que los imputados con los que alcance acuerdo presten declaración en el juicio. Para Felipe Meléndez, abogado del médico Francisco Casto –que se considera uno de los principales cabecillas de la trama–, el objetivo del fiscal es conseguir el máximo número de acuerdos para asegurarse testimonios a favor. «Busca acusar a los que no hemos aceptado», asegura el letrado.

El argumento que maneja Meléndez para la defensa es declarar nulo el procedimiento que se inició con las escuchas telefónicas. «El inicio de la investigación está viciado. Mantengo la inocencia de mi cliente y solicitaremos la nulidad procesal», adelanta a LA RAZÓN el abogado. El otro «cerebro» de la trama, el ex Jefe de la Policía Local de Ubrique, Carlos Carretero, también ha intentado llegar a un acuerdo con el fiscal, que le propuso rebajar la condena a cuatro años y medio de prisión (frente a los diez iniciales). De momento, el abogado de Casto no tiene constancia de que el pacto se hiciese efectivo aunque asegura que, de ser así, el ex policía arremeterá contra su cliente.

En la jornada de hoy, en la que se expondrán las cuestiones previas, la tensión está garantizada. Los imputados que han alcanzado pactos con el fiscal se enfrentarán al resto de los acusados. Entre ellos, María José Campanario, que, representada por su abogado, Francisco Baena Bocanegra, tendrá que defenderse de la acusación de haber pagado nada más y nada menos que 18.000 euros por una invalidez para su madre, Remedios Torres. A la espera de lo que ocurra en el día de hoy, el juicio se retomará el 11 de mayo.