Autonomías

Cruz aparta el rencor y se define un defensor de las críticas civilizadas

El consejero afirma en su primera comparecencia pública que nada va a cambiar en su vida

Los futbolistas del Real Murcia portaron una pancarta contra la violencia y camisetas de apoyo al consejero. El consejero de Cultura y Turismo de la Comunidad Autónoma de Murcia, Pedro Alberto Cruz, en su comparecencia de ayer
Los futbolistas del Real Murcia portaron una pancarta contra la violencia y camisetas de apoyo al consejero. El consejero de Cultura y Turismo de la Comunidad Autónoma de Murcia, Pedro Alberto Cruz, en su comparecencia de ayerlarazon

MURCIA-«La violencia jamás resuelve los conflictos, ni siquiera disminuye sus consecuencias dramáticas». Esta frase pronunciada por el Papa Juan Pablo II es la primera que a uno se le viene a la mente cuando reflexiona sobre la brutal agresión que sufrió el consejero de Cultura y Turismo, Pedro Alberto Cruz, el pasado sábado, 15 de enero. Ayer realizó su primera comparecencia pública ante más de 50 periodistas que se congregaron en la Sala de Prensa del Estadio Nueva Condomina para escuchar sus palabras. Poco después de las cuatro de la tarde salió el consejero perfectamente trajeado y con ostensibles secuelas de su agresión en el ojo izquierdo. Su mirada era lánguida, a medio camino entre la incomprensión y la resignación. «Jamás querría haber dado esta rueda de prensa y espero, por el bien de toda la sociedad, que nunca se tenga que volver a repetir». Esa fue la primera frase pronunciada por el consejero antes de atender las demandas informativas de los periodistas.

El director general de la Promoción de la Cultura y el Libro, Francisco Jiménez, adelantó esta semana que su consejero iría a ver el partido de fútbol entre el Real Murcia y el Cádiz. Los médicos desaconsejaban esta salida, pero su amor por todos los clubes de la Región fue mayor y Cruz no faltó a su cita con el equipo grana. «Comparezco ante ustedes porque me debo a todos los clubes de Murcia y porque me sirve de intento para perder el miedo escénico después de lo que me ha ocurrido», comentó el consejero de Cultura esbozando una media sonrisa. Aseguró que su estado físico mejora con el paso de los días, pero que la situación psicológica es bastante «peor». Con respecto al transcurso de la investigación policial, no quiso decir ni una palabra y apeló al trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para que los agresores sean capturados.

Reconoció con firmeza que «nada en mi vida va a cambiar», aunque a renglón seguido admitió que «el 15 de enero (día de la brutal paliza) considero que volví a nacer». No mostró a lo largo de toda su intervención ni un ápice de rencor porque «no tengo tiempo para ello y quiero dedicar todos mis esfuerzos a construir dentro de mis distintas facetas (profesor universitario, escritor o político), lo único que quiero es olvidar cuanto antes lo ocurrido», aseveró. Defendió a ultranza la crítica, pero depuso sobre su utilización un aspecto que resulta a la par tan necesario como lógico, que ésta se haga de una forma «civilizada».

En este sentido, se mostró respetuoso con las actitudes críticas, pero anunció que siempre detestará a las personas que dicen informaciones falsas sabiendo que lo son y «lo aprovechan para acusarnos de despilfarradores». Para enfatizar esta declaración recordó que su Consejería no ha gastado ni un euro en Fórmula 1. Además, defendió el proceder de su equipo ya que «nunca hemos ocultado nada, lo único que se puede criticar es que hayamos sido demasiado transparentes». Preguntado por los periodistas sobre su posible salida de la política declaró que «mi única voluntad es continuar porque tengo muchas cosas por hacer». El proyecto sigue señores.

Arropado por su equipo de trabajo y amigosEn la reaparición pública de Cruz también se dieron cita sus directores generales Francisco Jiménez (Promoción de la Cultura y el Libro), Marina García (Turismo) y Enrique Ujaldón (Bellas Artes y Bienes Culturales). Gente allegada a la Consejería de Cultura asegura que uno de sus grandes claves para alcanzar el éxito es que son un grupo de amigos. Lo cierto es que el equipo de Pedro Alberto Cruz siempre se ha mostrado cercano a su persona. Desde el momento en el que trascendió la agresión, se puso a la vez de manifiesto la proximidad y la calidad humana del equipo de trabajo de Cruz. Lo que se percibe desde fuera es la actitud de una piña en la que cada decisión se adopta por consenso absoluto y en donde los mandatos dictatoriales no tiene cabida. Además, los jugadores del Murcia portaron una pancarta de apoyo al consejero.