El hermano de Borbolla que recibió 11 millones: «El perjudicado soy yo»

SEVILLa- Tal y como se preveía, el empresario y ex alcalde socialista del municipio sevillano de Cazalla de la Sierra, Ángel Rodríguez de la Borbolla, hermano del ex presidente de la Junta, no respondió a las preguntas que le formularon los tres partidos presentes en la comisión de los ERE. Ganas no le faltaron, o al menos eso pareció. En varias ocasiones tuvo que contenerlo su abogado, que le aconsejó no hablar por estar imputado por el juzgado que instruye el caso. El motivo es haber recibido más de nueve millones de euros por parte de la Consejería de Empleo de forma arbitraria y carente de procedimiento. También recibió de la agencia IDEA al menos un incentivo a la innovación, en forma de crédito a fondo perdido, de 2,7 millones.

La guerra entre el ex dirigente socialista y la Junta es abierta. Nada más comenzar su exposición inicial agradeció, con sorna, el «privilegio» de acudir a la comisión de investigación, pese a ser el único de entre varios centenares de receptores de ayudas del «fondo de reptiles» y en iguales condiciones que la suya, en hacerlo. La Junta, en un intento de demostrar la colaboración con el juzgado, fue la que pidió a la juez instructora que lo citara a declarar «en calidad de imputado», junto a otras seis personas. La denuncia de la Junta contra él, que repartió a los miembros de la mesa, la consideró «inmotivada, injusta y arbitraria. Desconozco a día de hoy qué hechos se me atribuyen».

La puesta en marcha en negocios relacionados con el corcho, y por los que recibió la mayoría de las ayudas, la enmarcó en la imposibilidad de los socios de estas empresas de hacer ampliaciones de capital debido a la crisis iniciada a partir de 1998. Empeñó«parte» de su «patrimonio» y el resultado es haberse quedado, alegó, «en la más absoluta ruina». «El principal perjudicado soy yo».

Tanto PP como IU aludieron a la coincidencia de que dos de sus empresas, Cortansa y Corchos de Cazalla, fueran agraciadas con dos ayudas justo después de que se firmara el convenio de julio de 2001 que inauguró el «fondo de reptiles». Concretamente, una de ellas fue otorgada el día después de la firma del convenio, el 18 de julio de ese año, por valor de 1,2 millones de euros.

El proyecto estrella de De la Borbolla fue la planta de ionización de corcho en el municipio sevillano de Villanueva del Río y Minas. Iba a ser la mayor planta de España. Hoy aún no se ha puesto en marcha. La Junta cedió gratis al Consistorio la finca donde se iba a ubicar la planta, que a su vez lo traspasó a tres empresas de Borbolla: Electron Service Line, Uprasa Inversiones y Enoworld. En 2005 recibió 1,5 millones del «fondo de reptiles» y un año más tarde 2,7 millones a fondo perdido de IDEA. En relación a este proyecto, esgrimió que cuando el proyecto iba por el 40 por ciento, un socio mayoritario se descolgó. Sólo pudo certificar una inversión de 8 millones y la subvención se redujo a un 25%, un millón de euros. «Siempre he tenido la convicción de que las ayudas eran legales», apostilló.