Mueren dos de los asesinos del cooperante italiano

Dos integristas islámicos murieron y uno resultó herido de forma leve en el asalto ayer por las Fuerzas de Seguridad del Gobierno de Hamas a una vivienda en la ciudad de Gaza en la que se refugiaban los presuntos miembros del comando salafista que asesinó al activista italiano Vittorio Arrigoni. El jefe del comando, el jordano Abdelrahman Brizar, se suicidó de un tiro al comenzar la operación de asalto para no ser capturado por la Policía, y después de lanzar una granada a sus dos compañeros, informó el Ministerio del Interior.
La explosión causó heridas graves a uno de ellos, que falleció horas después en un hospital, en tanto que el tercero está herido leve, confirmaron fuentes médicas en Gaza. El asalto tuvo lugar en una vivienda en el campo de refugiados de Nusseirat, cuatro kilómetros al noreste de la ciudad de Deir El Balaj, y en la que los tres presuntos miembros del comando salafista se habían refugiado.
En un comunicado, el Ministerio informó de que «la operación ha terminado después de cuatro horas» y un prolongado tiroteo en el que resultaron heridos leves tres agentes y un menor de edad. Un cuarto activista no identificado, que era propietario de la vivienda, fue detenido antes de comenzar la intervención.
Las fuerzas de Hamas consiguieron dar con el paradero de los cuatro sospechosos a primera hora de la tarde gracias a la publicación ayer de sus fotografías y nombres en internet y de colgar carteles de búsqueda y captura por toda la franja. Los cuatro son miembros del grupo «Al Yihad Al Tawhid», relacionado con la red terrorista Al Qaida, y que se hizo responsable el jueves del secuestro de Arrigoni, de 36 años de edad, en un vídeo colgado en Youtube.
Horas después, sin haber terminado todavía el ultimátum de 30 horas que habían dado al Movimiento de Resistencia Islámica para que liberase a tres de sus militantes, los secuestradores mataron a Arrigoni. Representantes del Ministerio del Interior trataron de negociar la rendición pacífica de los tres integristas e incluso llevaron delante de la casa a varios de sus familiares y a uno de los presos para los que pedían la liberación, Hisham Al Saydani, más conocido como Abu Al Waleed Al Maqdisi. Al Maqdisi, detenido el mes pasado en Gaza y que está considerado el dirigente del grupo salafista radical, trató de convencer a los tres sospechosos de que se entregaran.
El activista italiano, que había llegado a Gaza en 2008 en un barco que rompió el bloqueo israelí a la franja, fue objeto el lunes de un «homenaje nacional» antes de ser repatriado su cadáver a Italia a través de Egipto.