Murcia
Valcárcel arrasa otra vez en las urnas y eleva su listón hasta los 33 diputados
Todo empezó en 1995. Después de perder por un margen muy estrecho de votos la Alcaldía de Murcia en 1991, Ramón Luis Valcárcel trajo el primer mandato del Partido Popular a la Región de Murcia. Desde entonces, se desconoce cuál es el techo electoral de esta formación, que una vez más vuelve a romper su mayoría, logrando cuatro diputados más y alcanzando los 33 diputados en la Asamblea Regional.
El presidente Valcárcel avisó a lo largo del transcurso de la campaña electoral que no se iba a dejar cegar por los resultados que vertían las encuestas y sondeos, que ya le pronosticaban un nuevo record. Siempre se mostró cauteloso, aunque reconoció en varias ocasiones que prefería que las estimaciones reflejaran una tendencia favorable hacia su partido que lo contrario. Aún así, insistió en que no se debía vender la piel del oso hasta que el resultado electoral indicara que se había cazado. Sin lugar a dudas, las estimaciones no se apartaron de la realidad, ya que ahondaron en la diferencia existente entre los dos grandes partidos de la Comunidad Autónoma.
En el caso de los socialistas, sus resultados tampoco variaron de lo que dictaban las encuestas. La estrategia de desgaste diseñada por la formación de García Retegui en un intento deliberado de inculcar en los ciudadanos la idea de que el proyecto del PP había acabado, resultó ser un nuevo fracaso. De esta manera, el PSRM continuó con su caída libre y únicamente logró once diputados, perdiendo cuatro con respecto a los comicios de 2007 y dando signos de que el relevo en su candidatura que se produjo tras la marcha de Pedro Saura y la llegada de Begoña García Retegui no ha servido de acicate para su electorado como se pretendía desde la calle Princesa.
En el otro lado de la balanza, se encuentran los populares que tienen por delante su quinto mandato consecutivo con la sensación de que poseen el respaldo absoluto de una ciudadanía que no les dio ayer la espalda a pesar de las turbulencias que estuvieron presentes durante el pasado año, con la aprobación del Plan de Reequilibrio, adoptado en el mes de diciembre.
Por su parte, la tercera gran formación regional, Izquierda Unida-Verdes, cosechó unos resultados muy similares a los del proceso electoral anterior, manteniendo el diputado con el que ya contaba y sosteniéndose ante la posible irrupción de UPyD dentro del Parlamento murciano.
Finalmente, la opción magenta se quedó a las puertas de obtener representación en la Comunidad y, no sació por completo su apetito electoral. Sin embargo, esta alternativa sí fue capaz de hacerse un hueco en las municipales, en varias de las seis ciudades en las que concurrió a las elecciones. La formación liderada en la Región por Rafael Sánchez mostró con solvencia que su aparición por primera vez en las urnas supuso una convulsión electoral que demuestra que se puede estar ante un partido que puede tener recorrido como una alternativa para la izquierda ante el desencanto que produce el PSRM.
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