El Ejecutivo de Camps reabre la puerta para pedir los «privilegios» de Cataluña

Ningún gobernante autonómico está dispuesto a pasar por el aro de que sus ciudadanos crean que Madrid le dicta el camino. Y mucho menos cuando afecta a cuestiones de autogobierno. Ahí se explica el cruce de declaraciones que llegan desde Valencia.

La Generalitat respondió a la sentencia del Estatut blandiendo la «cláusula Camps», disposición estatutaria por la que se abre la puerta a promover las reformas necesarias para tener los mismos «privilegios» que cualquier otra comunidad. El problema es que este discurso choca con la estrategia de la dirección nacional, que no quiere enredarse en polémicas con Cataluña. Por eso Rajoy ha iniciado una ronda de contactos con sus dirigentes territoriales.

Ayer, la portavoz del Consejo de Gobierno, Paula Sánchez de León, introducía precisiones sobre la interpretación de hace unos días en la que la Generalitat renunciaba a aplicar la «cláusula Camps». Sánchez de León negó la mayor y ratificó «íntegramente» la reivindicación de esa cláusula.

«Cuando conozcamos íntegramente la sentencia y cuando conozcamos los recursos que tenemos planteados tomaremos las decisiones oportunas», matizaba la portavoz valenciana. Además, negó que Madrid les haya limitado la aplicación de la norma que les habilita a actuar para adquirir las mismas competencias que obtengan otras autonomías.