Garantizada la seguridad tras perderse un dossier

El dossier, de once páginas, fue hallado en la calle Lluís Antúnez con Vía Augusta. Entre los papeles, aparece un listado, sellado por el Ministerio del Interior, de nombres, números de teléfono fijo y móvil y la dirección de correo electrónico de altos cargos de los Cuerpos de Seguridad que se reunieron el pasado 7 de octubre para concretar la organización del Centro de Coordinación Operativa de cara a la visita del Papa a Barcelona.

Agente sancionado
En otro de los documentos se detallan las necesidades materiales y el número de agentes que se requerirán, así como la fecha y la hora en la que debería entrar en funcionamiento el Centro de Coordinación Operativa, según la Unidad Central de Protección.

Una tercera hoja corresponde a un correo firmado por el jefe de sección de Seguridad Electrónica de la Policía Nacional, en el que se detalla la cifra de cámaras de seguridad y de inhibidores de frecuencia que se han instalado en los alrededores de la Sagrada Familia.

También aparece una relación de los hoteles donde se alojará el séquito del Papa. Y, en un cuarto documento, puede leerse un número de dirección de IP y el número de módems que pide la Policía por Sitel, un sistema para interceptar comunicaciones digitales, así como otra dirección de IP, con un nombre de usuario y la contraseña para acceder. En el reverso aparece escrito el nombre de un teniente coronel bajo las palabras «Casa Real». De ello dio cuenta ayer la emisora de radio RAC-1, a la que el vecino acudió para entregar la documentación en vez de dirigirse a la Policía.

El Gobierno restó importancia al contenido de los documentos extraviados. Al término del Consejo de Ministros, el vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, negó que contuvieran el plan de seguridad de la visita del Papa. No obstante, confirmó que algunos de los «papeles» se referían a la logística del viaje.

Según explicó, el agente extravió esta documentación hace un mes y, tras comunicarlo a sus superiores, se procedió a cambiar todo lo que podía afectar a la seguridad de la visita papal. Aunque «reitero que no había aspectos fundamentales». Por eso garantizó «toda la seguridad del viaje del Santo Padre». Al agente se le ha abierto un expediente informativo para averiguar cómo y por qué perdió documentos tan sensibles. El vicepresidente no pudo evitar criticar la actitud del vecino. «¿Qué pasó? ¿Quién se encontró los documentos? ¿Por qué no los llevó a una comisaría? ¿Tal vez se los dio a su mujer? Son preguntas que me hago en voz alta. No tiene mayor importancia. Es por curiosidad. Algún día me enteraré de lo que pasó», sentenció.
El dispositivo de seguridad en Barcelona está formado por 20.000 agentes.