Castilla y León

Encuentran el cadáver del abogado desaparecido en Burgos desde febrero

La Razón
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Burgos- Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado encontraron en una sima de los montes de La Engaña, en la Merindad de Valdeporres (Burgos), el cadáver del abogado vizcaíno José Javier Ezquerra Uriarte, de 49 años de edad, desaparecido el pasado mes de febrero en el norte de la provincia burgalesa. El subdelegado del Gobierno en Burgos, José María Arribas, informó del hallazgo del cuerpo sin vida, tras la confesión ante el juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Getxo del ganadero Doroteo Braceras, que se declaró culpable de su muerte. En su declaración, indicó el lugar donde se encontraban los restos de la víctima, en una sima de montes de La Engaña, con una profundidad de ocho o diez metros en el entorno de una finca de 40 hectáreas que el autor confeso tenía arrendada con su hermano. Arribas indicó que el cuerpo se encontraba ya en estado de descomposición y tenía la cabeza tapada con una bolsa. El pasado 15 de febrero un familiar del abogado interpuso una denuncia por su desaparición y se inició la investigación para intentar localizarle. Los dos ganaderos del Valle de Mena ingresaron en la prisión de Basauri en el mes de marzo. Por el momento, Arribas afirmó que no se puede determinar el móvil que haya condicionado estas circunstancias porque la investigación y las diligencias las realizan la policía vasca y porque se ha declarado el secreto parcial de sumario. El subdelegado del Gobierno señaló que se está realizando la autopsia en el Instituto de Medicina Legal por lo que la causa de la muerte aún no se puede confirmar. También destacó la colaboración que han desarrollado los agentes de la provincia burgalesa.

 

Una cueva de difícil acceso
El capitán jefe de la compañía de la Guardia Civil de Medina de Pomar, Francisco Prieto, informó de que, ante la llamada de la policía autonómica vasca, se trasladaron a la zona de Pedrosa de Valdeporres, y se encontraron con «una cueva distante de una pista de difícil acceso», por lo que reconoció la «dificultad» para sacar el cadáver y declaró que se requirió la ayuda del Grupo Espeleológico de Montaña con base en Ezcaray.