Mecenas

Un mecenas es alguien que teniendo poder y dinero tiene también sensibilidad para gastarse una parte en ayudar a personas que tienen talento artístico y falta de pan. El mecenazgo apareció en el Renacimiento y aunque los artistas no recibían un pago inmediato por su trabajo, sí que podían recibir comida y un lugar para vivir mientras creaban. La cosa se está poniendo tan fea por estos lares y en esta época, que como no empiecen los ricos a gustar de esta posibilidad, el arte y sus hacedores genuinos van a tener que inspirarse en los comedores de beneficencia. No, no es una broma, es importante esa nueva ley de mecenazgo que está proponiendo el gobierno. Y para que funcione hay que hacer algo más que desgravar, hay que convencer a pudientes y no pudientes, a políticos y gente de a pie, de que no hay nada con mayor sentido que el construir una sociedad donde florezca la creatividad, lo mejor que tiene el ser humano. Una sociedad llena de música, pintura, baile, teatro, cine, poesía… llena, en una palabra, de vida. Es necesario también que los artistas trabajemos con los pobres, los desarraigados, los excluidos… es fundamental que nos convirtamos en vínculo entre la élite social y los que no tienen recursos ni para defenderse del mal. Es una manera de facilitar la transformación. Y hay que conseguir que sea de más desgravación y prestigio para los mecenas favorecer a los independientes, a los jóvenes, a las artistas, a los alternativos, a los que tienen algo que decir auténtico y con contenido. A los que saben de su responsabilidad por hacer un mundo mejor. Así que atentos a esa ley de mecenazgo.