A los tribunales

No ganamos para sustos. Algunas mañanas piensas que es mejor no levantarse. Ayer, por ejemplo. Primero, oyes la radio. Después, lees los periódicos. Los directivos de Emarsa abusaron de largo en la gestión del dinero. Unos cuantos ¡a los tribunales!. La Fiscalía investiga los excesos de Urdangarin en su relación con las instituciones. ¡A los tribunales!. El ministro de Fomento, José Blanco, imputado en un caso de tráfico de influencias y sabe Dios qué más. ¡A los tribunales!. El fiscal lamenta que el despilfarro no sea delito en las facturas de Calatrava. Se libra de los tribunales sin que comprendamos muy bien por qué. Les Corts estudiarán en la Comisión del Diputado el kilometraje de la alcaldesa de Alicante. Por eso no, pero por el PGOU de su ciudad ¡a los tribunales!. El Banco de Valencia investiga al exconsejero delegado. Veremos si llega a los tribunales.

Y todo en un mismo día. Contemplando el panorama, mi amigo Rogelio se preguntaba: ¿sin todo eso y lo demás no estaríamos en mejores condiciones económicas?. Tendrá razón García Margallo cuando habla de la necesidad de crear un país nuevo. Así es la vida.