Fibes renovado por Enrique Miguel RODRÍGUEZ

El Palacio de Congresos y Exposiciones nació, como tantas cosas, al rebufo de la Expo'92 . Ha rendido buenos servicios a Sevilla. Allí nació Sicab, el salón internacional del caballo, que se convirtió en un éxito internacional, siendo «adoptado» por el Ayuntamiento, encuadrándolo en la Delegación de Fiestas Mayores y convirtiéndose en el tercer festejo, después de la Semana Santa y la Feria. También surgió el salón de la moda flamenca, Simof, que había nacido modestamente en el hotel Alcora, de la mano de Raquel Revuelta. Tuvo acogida y puesta de largo en Fibes. Otro éxito fue la Feria del Toro, pero ese personalismo que rodea el complicado mundo taurino hizo que desapareciera, cuando era el mejor escaparate de la fiesta nacional en los momentos en que los ataques a la misma arreciaban. Sabido es que vivimos tiempos recios y, sin duda, trepidantes. Por ello, lo que ayer fue bueno, hoy está desfasado. Eso le pasó a nuestro palacio de congresos. Ponerlo al día tropezó con la cuestión económica y la falta de cooperación de la Administración central, la autonómica e incluso la Diputación. El actual equipo municipal dio un impulso decisivo y por fin después de una larga espera la ampliación de Fibes es una gozosa realidad, contando con el mayor auditorio de España.

Por todo ello, «Herrera en la Onda», invitado por el alcalde, hizo ayer el programa desde el inmenso escenario recién estrenado. Esta grandiosidad me recuerda la anécdota que contaba Naty Mistral, que decía que era tan grande el tablado donde se representaba «Azabache» en la Expo, que ella y Juanita Reina, cuando llegaban al centro del escenario, ya estaban agotaditas y tenían que tomarse un respiro antes de empezar a cantar. Estas nuevas instalaciones ya han acogido dos grandes congresos que han traído a la ciudad a más de 8.000 personas de alto nivel, que han llenado hoteles, restaurantes, bares y todos los servicios que este tipo de turistas usan. Se han vendido mas de 12.000 localidades para los espectáculos que hasta el momento se han programado. Un auténtico maná en momentos de penuria.