España
Juan Rosell: «Hemos comido más de tres platos al día hay que pagar los excesos»
Siendo muy joven se incorporó a la empresa familiar (Juguetes Congost, entonces)y le tocó lidiar con los sindicatos la negociación colectiva. Desde entonces, no se ha desvinculado del mundo empresarial. Preside Congost Plastic y la CEOE, y es consejero de CaixaBank, Port Aventura o Gas Natural Fenosa. Su escaso tiempo libre lo "malgasta"en leer –atesora en sus casas alrederdor de 10.000 títulos, sobre todo de economía e historia–, escribir y practicar algo de deporte (tenis), aficiones que comparte con una pasión, el fútbol y el Barça. Cree que el problema de España es que ha gastado más de lo que podía.
–¿Se puede ir la economía española de vacaciones?
–Se va a ir. Pero nos vamos a ir con un ojo mirando a lo que está pasando. Nos vamos preocupados. El año pasado ya sucedió algo parecido. Recuerdo que me llamó el presidente del Gobierno para convocarnos en mitad de agosto a la CEOE y a los secretarios generales de CC OO y UGT para hablar de los acuerdos que sería conveniente alcanzar, entre ellos el de moderación salarial.
–¿No hay más que una política posible?
–En Maastricht se fijó un déficit del 3% y una deuda del 60% en términos de PIB. Y todos, empezando por los países más grandes, lo hemos incumplido. Alemania en catorce ocasiones entre 2000 y 2010; Francia, en 14 también; Italia, en 18 y España en cuatro, en los últimos años.
–¿Por qué?
–Hemos incrementado muchísimo las recaudaciones y a partir de ahí dijimos que había dinero para todo y para todos. Y muchas veces desproporcionadamente. Hemos comido más de tres platos al día; ahora vamos a tener que pagar los excesos cometidos durante mucho tiempo.
-¿Tan mal está el enfermo?
–Ha comido demasiado. Ahora tiene que tener un plan de adelgazamiento.
–¿Nos sobra de todo?
–Nos sobran universidades, carreteras, polideportivos, infraestructuras, aeropuertos y, por encima de todo, millones en gasto corriente.
–¿Qué hemos hecho?
–Nos hemos pasado de rosca mucho. Hemos gastado muchísimo; más de lo que podíamos gastar, tanto en lo privado como en lo público.
–¿Pero no aparecen culpables?
–Todos. Los que daban el dinero, los que lo pedían, los que tenían que dar la voz de alarma... Aquí no hay ningún inocente.
–¿Corre peligro el Estado del Bienestar?
–Habrá que gestionarlo de manera distinta. Yo creo que hay una nueva manera de gastar mejor en las dos grandes partidas que son la Sanidad y la Educación.
–¿Está obsesionado con los mercados?
–Lo miro al final del día. Es demasiado estresante.
–¿Puede aguantar el país mucho tiempo con la deuda en el 7%?
–En 1992, el coste de la deuda española era el doble. En 1995 un crédito estaba al 14-15%. Además, el coste medio de la deuda española es un 4,06%. El Banco Central Europeo se hizo para controlar la inflación y quien diga que no lo ha hecho, miente. Y si ahora hay que apoyar a un Estado, se le apoya, si hay que imprimir billetes, se imprimen.
–No hay ahorro ni gasto ni inversión. ¿No es dramático?
–Lo dramático es que tenemos el 65% de las empresas perdiendo dinero. Han desaparecido más de 100.000 empresas con centros de trabajo en España.
–¿Se sigue viendo mal a los empresarios?
–Desde las guarderías al último día en la Universidad tendría que haber asignaturas que valorasen el buen hacer de las empresas. Enseñar que sin empresas no existen los países, no se crea riqueza. La gente quiere ser funcionario; nada de riesgo y cobrar a final de mes.
–¿Cuál es nuestra asignatura pendiente?
–Las reformas. Parece que tenemos miedo a darle la vuelta al calcetín.
–¿Nos hemos quedado cortos en las que hemos hecho?
–Hemos tenido miedo a entrar en todo.
–Cómo es su relación con los sindicatos?
–Buena. Tenemos diferentes mentalidades. Yo quizás sea demasiado rupturista y ellos no. Y los gobiernos, éste y el anterior, tampoco han sido capaces de ponernos de acuerdo. Muchas veces teniendo huevos y patatas no llegamos a hacer una tortilla.
–Y al Gobierno actual, ¿cómo lo ve?
–Preocupado. Está en una situación mucho peor de la que esperaban.
–¿Habrá que recortar las pensiones o el desempleo?
–Habrá primero que cuadrar los números. Y si hay que tocar una serie de gastos que ahora están comprometidos, habrá que hacerlo, porque no queda otro remedio.
–¿Se ve mucho con Rajoy?
–Lo suficiente.
–¿Más que con Zapatero?
–Por el estilo.
–José María Cuevas comentó que se sentía como una maleta con tantos viajes de trabajo. ¿Le pasa lo mismo a usted?
–Ahora es una época más reposada, se viaja menos.
–¿Tanto tiempo le roba este despacho?
–Todas las horas del mundo .
–Vamos, que vive aquí, ¿no?
–Tanto no. Entre Madrid y Barcelona.
–Tendrá la Iberia Plus a reventar...
–Lo único que les falta es que me dejen pilotar el avión. En Iberia me tratan muy bien y hay que decir que la puntualidad de Iberia en el puente aéreo es de matrícula de honor.
Culé «desde el día que nací, igual que mis tres hijos». Presume de tener ya las entradas para ver la final de la Supercopa contra el Real Madrid. Se siente orgulloso de haber visto el mejor fútbol del mundo con el actual Barça y al «mejor jugador de la historia del fútbol», Messi.
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