Respeto total del Eurogrupo al calendario que fije Rajoy

LUXEMBURGO- El club de ministros de la zona euro, reunidos ayer en Luxemburgo, mostró su respeto absoluto por la decisión del Gobierno de Mariano Rajoy de no pedir un rescate a sus socios comunitarios, al menos de momento. El ministro de Economía, Luis de Guindos, compareció ante sus homólogos para tranquilizarles y les explicó con detalle las decisiones tomadas en las últimas semanas respecto al plan de reformas, el presupuesto de este año y de 2013 y las últimas subastas de deuda.

A su vez, Alemania ratificó que España no necesita «ningún programa de asistencia financiera», mientras el presidente del Eurogrupo, Jean Claude Juncker, repitió que la decisión de solicitar un programa de ayuda es una cuestión que corresponde al Gobierno y nadie puede aconsejarle al respecto. El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, mostró estar en la misma longitud de onda que el Ejecutivo español.

«Oigo lo que dice el Gobierno»
«Yo sólo oigo lo que dice el Gobierno español y ratifico que eso es así: el Gobierno español dice que no necesita ningún programa de asistencia financiera», dijo a su entrada a la reunión, desde donde destacó que «España hace todo lo necesario en política de finanzas y reformas estructurales» y el único escollo es que «tiene un problema con sus bancos como consecuencia de la burbuja inmobiliaria de años anteriores y por eso recibe ayuda para la recapitalización de la banca». «España no necesita ningún programa de asistencia financiera», afirmó el responsable alemán de finanzas.

 El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, también pareció imbuido por la confianza y aseguró estar «menos pesimista» que la pasada primavera respecto a la situación económica de la zona del euro gracias a las reformas emprendidas por países como España. «En Madrid dije que era totalmente consciente de lo duros que son estos momentos para el pueblo español, lo mismo puedo decir de Grecia, Portugal. Acabar con los desequilibrios era inevitable, pero siempre supimos que el ajuste iba a ser doloroso y difícil. Tenemos que congratularnos de que este ejercicio va en buen camino, porque es necesario para el relanzamiento economico y el empleo», reveló Rehn.

También Juncker se mostró satisfecho con las medidas de consolidación adoptadas hasta ahora por el Gobierno español. «Hemos escuchado a las autoridades españoles en cuanto a la recapitalización bancaria y hemos recibido muy favorablemente las reformas de carácter estructural que presentó el Gobierno el 27 septiembre. Damos animos a España a que sigan con estas medidas reformas y lo hagan de forma resuelta», reveló Juncker.

 Por su parte, el ministro español tenía su propio mensaje para sus socios. Advirtió que España, que espera no tener que hacer más ajustes, hará todo lo necesario para cumplir sus objetivos de déficit y de reformas, pero eso tiene que tener una correspondencia entre sus socios. «En la prima de riesgo de una serie de países se han reflejado dudas sobre el futuro del euro y eso hay que eliminarlo», advirtió.

«España tiene que hacer su parte y España lo va a hacer todo, el cumplimiento de la senda de déficit público y las reformas económicas», dijo, pero por otro lado, «tenemos que avanzar también en la eliminación de todas las dudas que existen sobre el futuro del euro». Eso es fundamental. Mientras existan dudas sobre el futuro del euro, es difícil que exista una recuperación en España», manifestó De Guindos.

Respaldo del BCE
El Banco Central Europeo (BCE) se unió a los elogios a la reforma laboral aplicada en España para afrontar el desempleo provocado por la crisis. Estas reformas incluyen «medidas importantes para incrementar la flexibilidad en las negociaciones salariales y reducir la excesiva protección del empleo», señala en un informe en el que considera que estas reformas constituyen los primeros pasos adecuados para mejorar la competitividad de estos países y del conjunto de la zona del euro.

El MEDE, la piedra angular del euro
Ayer se celebró en Luxemburgo la reunión inaugural del fondo de rescate permanente, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE). El nuevo instrumento aporta nuevas herramientas que darán más oportunidades para salvar a los países con dificultades de financiación de su deuda. En total, la dotación inicial es de 200.000 millones de euros, que llegarán a convertirse en 500.000 millones en los próximos 18 meses gracias a las aportaciones de los estados miembros, en función de su riqueza: Alemania apoya el 27%, Francia, el 20,5%, Italia, el 17,9% y España, el 11,9%. Como regalo de nacimiento, Fitch y Moody's le dieron ayer la máxima calificación (AAA) como emisor de deuda a largo plazo. El MEDE podrá comprar bonos en las subastas, lo que equivale a prestar directamente a los gobiernos, o incluso en el mercado secundario. También podrá dar préstamos blandos ligados a programas de ajuste estatal y macroeconómico.

El FMI visitará España la semana que viene
 La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, anunció ayer que un equipo de la institución viajará a finales de la próxima semana a España para el primer ejercicio de supervisión de la reforma del sector financiero. «Estamos enviando a nuestro equipo justo después de nuestra reunión anual en Tokio, eso es a finales de la próxima semana, para el primer ejercicio de supervisión de la reforma del sector financiero», indicó la responsable del FMI.