Cajasol desoye al Ayuntamiento y seguirá con las obras de la Torre Pelli

Sevilla- Tras el demoledor informe de la Unesco instando a paralizar la construcción de la Torre Pelli por su impacto sobre los monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad, el Ayuntamiento reclamó a Cajasol que no siguiera con las obras en altura hasta alcanzar un acuerdo. Ayer, la entidad que preside Antonio Pulido hizo valer la legalidad del proyecto y anunció, tras reunirse con el alcalde, Juan Ignacio Zoido, que los trabajos seguirán «con absoluta normalidad», aunque «con la vista puesta en las recomendaciones que pueda hacer el Ayuntamiento».
De esta manera, Cajasol desoye la primera petición del Gobierno local y resta legitimidad al informe de la Unesco. Tanto que Pulido aseguró que elevará al Consistorio una serie de alegaciones para rebatir el documento. «Contiene importantes errores técnicos en aspectos tan obvios como la distancia, porque la torre no está a 600 metros de los monumentos, sino a 1.700», subrayó. Por ello, insistió en que no se actuará sobre el ritmo o la dimensión de las obras «sin un requerimiento legal». Cabe recordar que las obras avanzan a un ritmo de una planta por semana.
También matizó que «en absoluto están en peligro» los edificios declarados Patrimonio de la Humanidad y defendió la posibilidad de «conjugar la viabilidad del proyecto con los intereses de la ciudad».
Por su parte, Zoido señaló que se constituirá una comisión de trabajo al objeto de «compaginar todos los intereses que están en juego». En relación a la licencia otorgada por el anterior equipo de Gobierno, señaló que es «legal», aunque reclamó un pronunciamiento «claro» de la Junta sobre este asunto porque «fue la administración que dio luz verde al PGOU de 2006 y es la máxima responsable en la ordenación del territorio».
«Defiendo la seguridad jurídica para atraer inversiones y la necesidad de que Sevilla no pierda su catalogación patrimonial», remarcó el regidor, quien subrayó la necesidad de que las tres administraciones –central, autonómica y local– «vayan de la mano» para encontrar una solución satisfactoria.
Zoido también planteó este asunto al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, durante el encuentro institucional que mantuvieron en el Palacio de San Telmo. Tras la reunión, la consejera de Presidencia, Mar Moreno, puso de relieve el «compromiso» de Griñán para «no convertir este asunto en una confrontación política». «La solución tiene que ser mesurada», apuntó.