Londres
Cómo vivir con un perro más grande que un león
MADRID- Se llama George y es el perro más grande del mundo. Con 2,10 metros de largo, 109 centímetros de alto y 115 kilogramos de peso, este Gran Danés consiguió el récord Guiness el pasado febrero. George vive con su familia en la ciudad estadounidense de Tucson, Arizona, donde se ha convertido en toda una estrella mediática. Todo el mundo quiere medirse con «Giant George». «No me puedo imaginar cómo tiene que ser la vida de los famosos, todo el día perseguidos por fotógrafos», cuenta David Nasser, su dueño, que atendió por teléfono a LA RAZÓN.Nasser sabía que los Gran Danés eran una raza grande, pero nunca se imaginó que el suyo iba a convertirse en el de mayor tamaño. «Cuando iba al parque canino, veía a un hombre con un enorme gran danés, y me decía: ‘‘por favor, que el mío no crezca tanto''. Sin embargo, ahora es el más grande del mundo y como ha ido creciendo con nosotros, no ha sido un shock». George, que tiene cuatro años y medio, es una mascota muy especial. «Duerme en una cama "queen size"[de matrimonio], le damos huesos gigantes como premio y no cabe en el coche de mi mujer», explica su dueño. Nasser empezó todo el proceso del «Guinness» cuando un día en el zoo, hace ya un año, se dio cuenta de que su George era más grande, incluso, que los leones. Para conseguir el premio, Nasser hizo una grabación en la que un veterinario medía a George y la envió a la sede del Guinness de los Récords en Londres. Después, le pidieron otro vídeo en el que repitiera la medición con otro veterinario distinto y, por último, los del Guinnes enviaron a su propio juez. Tras contrastar los datos y comprobar que eran ciertos, Giant George se hizo con el título de «perro más grande del mundo». Desde que en febrero le otorgaran el diploma, la agenda de George gira en torno a visitas a colegios, entrevistas o actos caritativos. Tiene más de 42.800 amigos en Facebook e, incluso, ha estado en el plató de Oprah Winfrey. A Nasser no le importa que su gran danés se coma una bolsa de pienso de 54,43 kilos mensual, pues es «un ser maravilloso y su mejor amigo». Incluso con la llegada de su hija hace ocho meses. «Somos muy cautelosos, y George está siendo muy delicado».
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