La Junta celebra una mínima subida del PIB que generó 46900 parados

SEVILLA-El Producto Interior Bruto andaluz creció en los tres primeros meses de este año un 0,5 por ciento gracias, según la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia, al «buen comportamiento de las exportaciones y del gasto en consumo final de las administraciones públicas e instituciones sin fines de lucro al servicio de hogares». Es la primera vez que lo hace desde el segundo trimestre de 2008.

Este dato publicado en la revista de Coyuntura Económica que elabora la propia Consejería, sirvió ayer a la Junta para anunciar que la economía «presenta señales de un proceso de recuperación». Además, la misma publicación avanza que la evolución de algunos indicadores del segundo trimestre del año «reflejan la continuidad de esta trayectoria de progresiva recuperación de la economía regional». El Banco de España también anunció ayer que la economía española en su conjunto creció un 0,2 por ciento en el segundo trimestre del año, lo que de alguna forma avala esta teoría.

Sin embargo, la controversia surge cuando desde el propio Gobierno andaluz se trata de trasladar este dato al mercado laboral y se asegura que ya se está notando porque se «ralentiza el ritmo de destrucción de empleo».

La Encuesta de Población Activa del primer trimestre de 2010 –periodo en el que el PIB regional creció medio punto– arrojó un balance muy claro: el paro aumentó en Andalucía en 46.900 personas y situó el número total de desempleados en 1.080.900 parados.

Pero es que la tendencia tampoco mejoró en el segundo trimestre. La última EPA publicada –segundo trimestre de este año– arrojó otros 23.200 parados más y colocó la cifra global de personas que carecen de un trabajo remunerado en 1.104.100. Actualmente, la tasa de paro de la región es de 27,78 por ciento, la segunda más alta de España sólo superada por Canarias (29,48).

Los distintos informes económicos advierten de que la recuperación del mercado laboral no se producirá hasta mediados de 2011 y así lo ha manifestado en alguna ocasión el propio consejero de Empleo, Manuel Recio.

De hecho, hay consenso en que el freno del gasto público para reducir el déficit provocará un retraso en la salida de la crisis económica y a final de este año se producirá un nuevo descenso en el número de ocupados.

Pese a todo, el argumento del Ejecutivo andaluz para mantener esta teoría es el mismo que mantiene desde hace meses: «el notable ritmo de incorporación de activos» lo que hace el paro en Andalucía suba a menor ritmo que el resto de España.