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Elecciones

Los islamistas anuncian una victoria «arrolladora»

Aseguran haber obtenido más del 60% de los votos en Marruecos 

Varias mujeres ejercen su derecho al voto cubiertas de la cabeza a los pies
Varias mujeres ejercen su derecho al voto cubiertas de la cabeza a los pieslarazon

«Al final maquillarán los datos y podrán decir que han obtenido un resultado de participación que supera el de 2007». Selma Maarouf, una de las representantes del Movimiento 20 de Febrero, no ocultaba ayer a LA RAZÓN su escepticismo cuando le preguntaba su opinión sobre el dato que arrojaban las urnas a las cinco de la tarde: un desolador 22,4% a las 3 de la tarde, cuatro horas antes del cierre de las urnas. Y lo cierto es que, en apenas dos horas, el porcentaje creció 12 puntos, para darle la razón. A las cinco de la tarde, con un 34 por ciento, según el Ministerio del Interior, las autoridades marroquíes estaban mucho más cerca de respirar con alivio: podían dar casi por aprobada la reválida, indirecta, a la que se sometía la Constitución refrendada el pasado 1 de julio y, de paso, el propio sistema de monarquía parlamentaria.

El resultado final, anunciado por el ministro del Interior Taieb Cherkaoui una hora y media después del cierre de los colegios electorales, terminó en el 45% que sospechaban muchos. Suficiente para que una cierta tranquilidad llegase al «establishment», para el que superar el bajísimo 37% de las elecciones legislativas de 2007 daría carta de naturaleza a una Constitución muy discutida en la calle por los grupos que integran en 20 de Febrero.

Sin demasiadas incidencias, por otra parte, la jornada electoral transcurrió ayer con normalidad. Sólo algunas denuncias de intentos de compra de votos y un enfrentamiento entre miembros del PAM y del USFP pusieron una nota escasamente polémica a un día en el que tampoco se notó un ambiente electoral en las calles.

Sin embargo, por la noche los acontecimientos avanzaron deprisa. Mientras el Ministerio del Interior convocaba para las cinco de la tarde de hoy sábado una conferencia de prensa en la que se darían a conocer los resultados oficiales, los responsables del PJD se preparaban para anunciar una victoria que no dudaron en calificar de «arrolladora» a última hora de la noche. Según fuentes del PJD consultadas por LA RAZÓN, los islamistas habrían obtenido más del 60 por ciento de los votos escrutados en todo el país, lo que les haría claros vencedores de estas elecciones y, por tanto, la fuerza de la que tendrá que salir el próximo primer ministro. Hay que matizar que, a pesar de haber obtenido una mayoría tan abrumadora de sufragios, el complicado sistema electoral de este reino hace prácticamente imposible una mayoría absoluta y, previsiblemente, obligará al PJD a buscar alianzas con otros partidos.

Precisamente, la sede del PJD era anoche un hervidero de idas y venidas, y de caras sonrientes que, sin embargo, en algunos momentos mostraron cierta preocupación. Al cierre de esta edición, sin embargo, los aplausos llenaban la sede, cuando un portavoz anunciaba la victoria que les deja abiertas las puertas del Gobierno por primera vez en su historia.
Mientras, en una pantalla gigante –al estilo de cualquier jornada electoral europea o norteamericana– los simpatizantes de la formación islamista seguían con interés las últimas noticias a través de la televisión estatal y se empezaban a escuchar comentarios respecto a que el Gobierno actual no se atrevería a discutir la victoria del hasta ahora principal partido de la oposición si no quería arriesgarse a tener una seria contestación en la calle.
A falta de que el Gobierno confirme los datos avanzados anoche por el partido islamista, las especulaciones se centraban en saber si su secretario general, Abdelilah Benkirane, será el próximo primer ministro. Lo cierto es que, con la plana mayor del PJD al completo, los recuentos realizados por sus interventores fueron llegando y confirmando la victoria del PJD.