Miami

Comienza el juicio del caso de la niña de EE UU estrangulada por una pitón

El juicio contra una pareja de estadounidenses acusados de homicidio involuntario por la muerte de la hija de uno de ellos, que falleció estrangulada por una pitón que tenían de mascota, comenzó hoy en un tribunal de Orlando (Florida).

Charles Darnell y su novia Jaren Hare afrontan también un cargo de homicidio en tercer grado por la muerte de la hija de ésta última, Shaiunna, el 1 de julio de 2009 en el condado de Sumter. La pitón, mascota de la pareja y de 3,6 metros de largo, se escapó de su tanque, que no estaba cerrado, y mató por estrangulamiento a la niña de dos años cuando dormía.
Sheryl Hare, abuela de la menor, testificó hoy que rogó a su hija que no tuviera a la culebra dentro de la casa porque la tapa del tanque no era segura, detalló el diario Orlando Sentinel en su edición digital. La mujer declaró que incluso ofreció comprar la pitón por 500 dólares a su hija, de 21 años, y recomendó a la pareja colocar una tabla contrachapada con bloques de cemento sobre el tanque.

El fiscal estatal Pete Magrino dijo que la pitón era "un instrumento de muerte"y que los acusados son responsables de la muerte de la niña al fallar en protegerla de la culebra que previamente se había escapado del tanque. Los abogados de la pareja -que de ser declarados culpables podrían afrontar una sentencia de hasta 35 años de cárcel- calificaron el suceso como "un accidente terrible". Rhiannon Arnold, abogada de Darnell, reconoció que la muerte podría haberse evitado, recordó al jurado que la niña era sólo hija de Hare y aseguró que la pitón, llamada "Gypsy", era dócil. Ismael Solis, defensor de Hare, explicó que su cliente tenía culebras desde los 14 años y que ella y su novio con frecuencia llevan de paseo a la pitón en su vehículo.

Según las autoridades, Darnell, que no tenía licencia para tener pitones como mascotas, había metido la noche anterior del suceso a la culebra en un saco para evitar que se escapara y la colocó en el interior del tanque que quedó abierto. A la mañana siguiente, Darnell, según dijo a la policía, halló a la pitón enroscada alrededor de la menor en la cama y rápidamente comenzó a apuñalar a la culebra hasta que logró separarla y llamar a urgencias. Los médicos intentaron reanimar a la niña, que mostraba señales de mordiscos, pero no pudieron salvarla.