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El «monstruo de Amstetten» se divorcia de su mujer por no visitarle en la cárcel

El 'monstruo de Amstetten', el austriaco que cumple cadena perpetua por haber abusado de su hija Elisabeth y haber tenido siete hijos con ella durante los 24 años que la tuvo encerrada en un sótano, se ha divorciado de su mujer, Rosemarie, por no visitarlo en la cárcel, según ha publicado este jueves la revista austriaca 'News'.

Josef Fritzl, que tuvo siete hijos con Elisabeth durante su cautiverio, está condenado por incesto, violación, coerción, detención ilegal, esclavitud y el homicidio de uno de sus hijos por negligencia.

Un portavoz del tribunal del distrito de Krems, en la región de Baja Austria, donde Fritzl cumple condena, ha dicho que no estaba autorizado para hablar sobre temas privados, tales como el divorcio, por lo que no se ha podido confirmar la noticia.

De los siete hijos que Fritzl tuvo con su hija, uno murió por negligencia, otros tres vivieron con Elisabeth hasta que pudieron huir en 2008 y los otros fueron criados por el matrimonio después de que el 'monstruo de Amstetten' los dejase a la puerta de su casa, para que pareciese que habían sido abandonados.

Según la revista, la esposa no recibiría ningún tipo de pensión. Rosemarie denunció la desaparición de su hija pero Fritzl ordenó a Elisabeth que escribiese una carta en la que dijese que había huido.