Austeridad necesaria

Por algo se empieza. Tenemos que ver muchas más medidas como la que anunció el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, de suprimir el ágape del 9 de octubre en el Palau. Cuando no hay dinero, la reducción del gasto debe afectar a todo. Los 200.000 euros de factura –excesiva cantidad para tan parco festolín- multiplicado por diez eventos similares ya son dos millones, cantidad digna ya de tener en cuenta.
Lástima que las elecciones del 20 de noviembre estén retrasando toda una serie de medidas imprescindibles si el Molt Honorable sigue adelante con el programa anunciado desde que accedió al cargo, que contempla la reorganización ¡vaya palabra sufrida! de todas las empresas públicas: Ciegsa, RTVV, Cacsa, IVVSA … Si ha de ser, cuanto antes mejor.
La Administración, como ha reiterado muchas veces el presidente en estos dos meses, ha de apretarse el cinturón y ajustar sus cuentas, como ya han hecho las familias y las empresas. Lo exigen los más de 20.000 millones de euros de deuda y la responsabilidad política. Así es la vida.