Demasiado sufrimiento

Casi siete horas después de empezar la eliminatoria ante Kazajistán, España cerraba la primera jornada con las dos victorias pronosticadas. Hubo que esperar mucho y sufrir demasiado para que Ferrero y Almagro derrotasen a Kukushkin y Golubev, respectivamente. Cinco sets en el primer partido, casi cuatro horas y media; cuatro sets en el segundo punto y otro par de horas largas para el cuerpo. España dispone hoy de la primera oportunidad para sentenciar el pase a cuartos de final. En la siguiente ronda se vislumbra un duelo con Austria en el que «La Roja» volvería a actuar como local. Las semifinales son después de los Juegos y del Abierto de Estados Unidos, y entonces quizá algunos se podrían plantear regresar al equipo y...

«Vamos, coño, joder...». La primera reacción de Ferrero sobre la arcilla roja de Oviedo no pudo ser más expresiva. El número dos español volvía dos años después a la Davis y cumplía con los pronósticos ante Kukushkin, pero de qué manera. Hacía tiempo que Ferrero no sufría tanto para ganar un partido. Cuatro horas y 28 minutos necesitó para evitar que el kazajo se convirtiera en el nuevo héroe de su país. «No me imaginaba un partido tan duro. He tenido que correr mucho, pero el esfuerzo ha merecido la pena», acertó a comentar a pie de pista.

El desarrollo fue el típico de la Davis, pero el ambiente estuvo lejos de ser el habitual de las citas en las que la Ensaladera está en juego. Apenas 2.000 aficionados, un tercio de la capacidad del Palacio de Deportes, sufrieron con Ferrero. Porque el número dos español estuvo muy cerca de la derrota. Tuvo problemas físicos en la pierna derecha antes del «tie-break» de la tercera manga y se encontró con 1-3 en el quinto set. Muchas más dificultades de las esperadas. Kukushkin lo pegó todo y, como durante tres sets le salió bien, a Ferrero no le quedó más alternativa que correr y correr para evitar la sorpresa. Almagro tomó nota y salvo los despistes del segundo set no tuvo demasiadas complicaciones ante el número 132 del mundo.

La pareja española puede debutar hoy a lo grande. Granollers ya sabe lo que es el doble en esta competición. Marc López, «Boleta» –bajito y gordito en catalán– para sus compañeros, es el novato. Él es la apuesta de Corretja. La intención del capitán es que la nueva pareja se asiente y compita desde ya. Marc es un especialista y en el circuito ha formado pareja con Feliciano, Robredo... Así hasta seis jugadores. Ha conquistado cinco títulos y sabe que está ante la oportunidad de su vida.