Caso Marta del Castillo

El hermano de Carcaño dijo que «algo gordo se le venía encima»

Un testigo ha asegurado que, tras la desaparición de la joven sevillana Marta del Castillo el 24 de enero de 2009, Francisco Javier Delgado, el hermano del autor confeso del crimen, le dijo que "algo gordo se le venía encima". "Le pregunté sobre esto, y me dijo que ya me enteraría", ha añadido.

En la novena sesión del juicio por la desaparición y el presunto asesinato de la joven, este testigo, amigo de Francisco Javier, ha indicado que, tras la desaparición de Marta, el hermano de Miguel Carcaño le dijo "también que quería dejar el bar", en una conversación en la que estuvo presente María García.

No obstante, ha dejado claro que Francisco Javier, con anterioridad a los hechos, ya le había comentado alguna vez "que quería dejar el bar"que regentaba junto a otros dos socios, "porque decía que no podía llevarlo todo".

Una testigo dice que Samuel «estaba constantemente pendiente del móvil» el día del crimen
Una testigo ha señalado que el día 24 de enero de 2009, cuando se produjo la desaparición de la joven Marta del Castillo, estuvo con el acusado Samuel Benítez, su exnovia y otra serie de amigos en Montequinto, y ha dicho que le llamó la atención que Samuel "estaba constantemente pendiente del teléfono móvil".

Durante la novena sesión del juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Sevilla por la desaparición y presunto asesinato de la joven, esta testigo, que ha declarado protegida por una mampara, ha señalado que, tras estar en un cumpleaños en Condequinto hasta las 19,15 horas del día 24 de enero, se marcharon a cenar y, sobre las 23,00 horas, se marcharon a un pub. Ha precisado que entre que concluyó el cumpleaños y fueron a cenar no vio a Samuel.

Una vez en el pub, Samuel "recibió unas cinco llamadas"y salió del pub "para hablar, unos cinco o diez minutos cada vez", lo que le llamó la atención. "No paraba con el móvil, ni cenando ni en el pub, estuvo continuamente mirando el teléfono", ha señalado esta testigo, quien también ha destacado que Samuel "no llevaba dinero, únicamente el dinero justo para coger el autobús". Así, no vio que el acusado empleara ese día un coche.