Mónaco

Quién dijo crisis El viaje (prohibitivo) en una réplica flotante de Mónaco

Contratar unas vacaciones en un crucero ha dejado de ser un lujo y ya existen opciones para todos los bolsillos. No parecen tan accesibles las últimas tendencias -y las que están por venir- para viajar en yates que recrean ciudades e islas paradisiacas.

Prototipo del «Isla paraíso». El sector de los cruceros apura el ingenio para mantener su buen momento
Prototipo del «Isla paraíso». El sector de los cruceros apura el ingenio para mantener su buen momentolarazon

En plena agitación social y económica por la recesión, de los rescates a Grecia y de los vaivenes de las agencias de calificación, no lo dude: hay un sector que no sabe de crisis.

La idea de hacer un crucero ya no equivale a unas vacaciones exclusivas. Ni siquiera si el crucero es en yate. Sólo hay que comparar ambas opciones con las nuevas tendencias de lujo extremo a bordo de recreaciones de ciudades o de paraísos tropicales.

Es el caso del yate «Isla Paraíso», una embarcación de 90 metros sobre la que se ha diseñado en cubierta una recreación de los principales tópicos de la Polinesia, el Océano Índico y los mares del Caribe. Para no escatimar en detalles, la isla flotante se completa con un volcán desde el que fluye el agua hasta la piscina, que a su vez ha sido diseñada como una pequeña playa. El escenario se completa con cinco cabañas.

En la parte posterior de la embarcación hay espacio para cuatro «suites» de lujo, además de las dependencias del propietario del barco, que dominan desde la parte superior toda la cubierta.

Las instalaciones a bordo incluyen sala de cine, gimnasio, spa y área de juegos. El diseño exterior del prototipo está inspirado en el dibujo de las olas cuando golpean la costa. Sin embargo, si alguien -con mucho dinero- tiene otras ideas creativas de añadir, el fabricante permite a sus clientes diseñar su propio yate con aspecto de isla flotante.

Las calles de Mónaco, en un yate
Otro de los ahora denominados «superyates» es el «Calles de Mónaco». En sus 155 metros de cubierta se recrea una pequeña sección del Principado, un referente en la industria de este tipo de embarcaciones gracias al prestigioso «Monaco Yacht Show».

Pero hablando del Principado monegasco, no podían faltar las carreras de coches. El barco cuenta con su propio circuito de «karts».

Este modelo hace gala de cuatro espacios principales en la cubierta. En el piso superior cuenta con una piscina principal con jacuzzi y bar alrededor de la plaza del Casino, adornada con una gran fuente con fondo de vidrio. Además de un helipuerto, el yate cuenta con varias terrazas y una barbacoa.

El área denominada «El Oasis» está inspirada en los jardines exteriores del Casino de Mónaco, y están presididos por una cascada central. En el nivel inferior, se encuentra el Spa con manicura y peluquería, salas de sauna, una sala de relajación con una piscina de hidromasaje, bar, gimnasio y una cafetería con vistas bajo el agua.