Cantabria

Las comunidades empiezan a meter la tijera

La falta de fondos para sufragar la asistencia sanitaria empezó a aquejar el pasado año a la mayor parte de las autonomías tras el verano. Se trata de un fenómeno que se acentuará presumiblemente en 2011 después del recorte de 55 euros de media por persona detectado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (Fadsp) en los presupuestos de las comunidades

La Razón
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Varios son los feudos que se encuentran a la vanguardia de estos particulares tijeretazos, dictados al margen del Ministerio de Sanidad, que afectan tanto a los medicamentos financiados con dinero público, como al personal que trabaja al servicio de hospitales y centros de salud. El caso más polémico estos días es el de Galicia, en donde la Xunta está a punto de poner en marcha una especie de «cataloguiño», como se le conoce en el sector. En virtud de él, se financiaría sólo el fármaco más barato de cada principio activo. Otra comunidad que podría seguir su estela es Andalucía. La Junta sigue presionando a los farmacéuticos para efectuar licitaciones públicas de cada principio activo. El objetivo es adjudicar a un solo laboratorio la provisión en exclusiva de cada medicamento. El resto de los territorios que cuentan con experiencia en recortes similares son el País Vasco, Cantabria y Castilla-La Mancha. En materia de personal, la supresión de las peonadas de los médicos en horario de tarde y la suspensión de la carrera profesional y los incentivos económicos que lleva aparejada empiezan a ser una tónica común. Murcia aplicará también recortes de horarios y de retribuciones adicionales. La unilateralidad de estas medidas y el enfado que están suscitando en los principales colectivos afectados han sido trasladados ya a Moncloa por varios agentes del sector, muy críticos por el pasivo papel que, a su juicio, está jugando el Ministerio de Sanidad. Fuentes del PSOE aseguran que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero podría haber encomendado al presidente extremeño y ex consejero de Salud, Guillermo Fernández Vara, la tarea de mediar entre Sanidad y los principales feudos socialistas.