La Liga de Mourinho por Gaspar Rossety

Del otro, la fuerza defensiva, la construcción desde atrás, la salida de balón y la velocidad, el ingenio de un Real Madrid reconciliado con el espíritu ganador, de la mano de un entrenador hecho a sí mismo sobre la base de la observación y la experiencia, definición que, a juicio de Charles Darwin, entraña el concepto de científico. Mourinho es un científico del balón. Me gusta.

Compartí aviones con él hace doce años, cuando trabajaba para el Barça. Se ha convertido en un especialista del título. Donde va, triunfa; gana. Y el Real Madrid necesita ganar. Lo vivimos en 2006 y llegó Capello. Se repite la necesidad y llega él. Me gusta la gente valiente, la que no duda, la que no teme el riesgo. Me gustan los triunfadores de ideas claras. Su personalidad absorbe la competición. Todos contra Mourinho. Esta Liga nuestra nos va a regalar el enfrentamiento de lo hecho contra lo que está en máquinas con buenas maneras y fundamentos. A Mourinho le juzgarán por sus victorias. Su espectáculo consiste en ganar títulos.

El Real es, a mi juicio, el gran candidato al título del Barca, mejorado éste con el futbolista que me reconcilia con la razón, David Villa, «el Guaje», mi Guaje. Futbolista crucial. El gran error madridista desde 2008. Un error con firma, nombre y apellidos. Seguramente, el jugador que hoy querría Mourinho.