Londres

Cameron y Clegg defienden la austeridad para hacer frente a la crisis

El primer ministro británico, el conservador David Cameron, y el viceprimer ministro, el liberaldemócrata Nick Clegg, insistieron hoy en que la austeridad es la mejor fórmula para hacer frente a la crisis económica.

En un intento de reafirmar su coalición de Gobierno, Cameron y Clegg pronunciaron un discurso durante una visita a una fábrica en Chelmsford (sur de Inglaterra), donde expusieron su determinación para seguir con las medidas de austeridad.

El primer ministro reconoció que es "un momento muy duro para las familias, porque los tiempos son difíciles", pero insistió en que el "Gobierno no puede abandonar su plan de reducción del déficit". "Cuando tienes un problema de deuda, no lo puedes resolver endeudándote más, los intereses tienen que mantenerse bajos", explicó Cameron ante un grupo de trabajadores. Pero el primer ministro dijo que esto no significa que el Gobierno no apueste por el crecimiento y que no se tengan que redoblar los esfuerzos en este sentido.

Por su parte, el viceprimer ministro dijo que "la economía ha sufrido un ataque al corazón" y que recuperarse de ello es "una labor ardua"."Hacer frente al déficit puede resultar deslucido, pero tenemos el deber moral con nuestros hijos y nietos de hacerlo. No les podemos dejar una herencia de deuda inasumible", apuntó el líder libraldemócrata.

Preguntados por su reacción a la victoria del candidato socialista Francois Hollande en las presidenciales de Francia, Clegg recordó que ese país "ha sido históricamente el principal aliado de los británicos".

Hollande "ha dejado muy claro que va a centrar sus políticas en el crecimiento. ¿Quién va a estar en contra de ello? Estamos deseando empezar a trabajar con él", dijo el viceprimer ministro, quien añadió que el crecimiento de Francia es bueno para el Reino Unido.

Los dos líderes utilizaron además la ocasión para defender una coalición de Gobierno, formada justo hace dos años, que está siendo muy criticada por las bases de los dos partidos tras los malos resultados en las elecciones municipales de la semana pasada.