Reino Unido
Teddy Bautista punto y final
No fue nada fácil convencerle. Ni tampoco a muchos de sus acólitos. Pero, finalmente, Teddy Bautista deja la SGAE: la junta directiva «acepta la renuncia de Eduardo Bautista, revelándole de todos sus cargos en la SGAE y entidades filiales, quedando sujeto a las investigaciones en curso».
Pocos minutos antes de que Sabino Méndez compareciera ante la Prensa para anunciar esta decisión, el ya ex presidente del consejo de dirección abandonaba discretamente el Palacio Longoria por la puerta de atrás y en su coche. Mientras, la junta elaboraba un comunicado en el que, además, anunciaba los miembros que integrarán la comisión gestora que pilotará una investigación interna y renovará la entidad.
«Trapos sucios del PSOE»
«Víctor Manuel, Imanol Uribe, Ernesto Caballero, Tomás Marco y Álvaro de Torres dirigirán y supervisarán la gestión diaria de la organización hasta la conformación del Consejo de Dirección, designando como presidente a un gestor externo e independiente que auma las máximas funciones ejecutivas encomendadas en los estatutos al presidente del Consejo de dirección». Es decir, el sustituto de Teddy, cuyo nombre no quisieron desvelar. Sin embargo, poco después el rumor se convirtió en confirmación: Miguel Satrústegui será el encargado de dirigir esta comisión.
Su selección no ha tardado, sin embargo, de generar polémica. En declaraciones a Ep Fermín Cabal Fermín Cabal, uno de los firmantes del manifiesto que pide la refundación de la SGAE, aseguró que «en ningún caso el presidente de esa comisión puede ser una persona ajena a la profesión sino que debe ser un músico, un escritor o un cineasta» y añadió que el elegido «aterriza sospechosamente procedente de una organización política donde ya ha demostrado suficientemente su ineptitud cuando fue subsecretario de Cultura y fue despedido a patadas por los profesionales. Es un error que Satrústegui esté ahí. Este hombre viene a tapar los trapos sucios del PSOE. Pero los socios no lo vamos a permitir», dijo.
A la vista de los integrantes de la Comisión Gestora, todos ellos miembros de distintas juntas directivas que apoyaron durante años a Teddy Bautista, pudiera parecer que la continuidad manda en la entidad, ayer, la junta directiva recién constituida ha querido trasladar a los medios un mensaje de cambio en la SGAE, que podría llegar, incluso a sus estatutos: «Articular iniciativas para la renovación de la SGAE con la misión de examinar la totalidad de sus actividades y consultar con los socios las reformas estatutarias pertinentes para garantizar la democracia y transparencia, tendiendo puentes a todos los socios y colectivos que quieran participar en el proceso de reforma», reza el comunicado.
Arteria, en entredicho
Es decir, mayor transparencia y participación, en respuesta a las críticas que durante años ha recibido la SGAE por dejar decidir sólo a unos pocos. El guiño también parece dirigido, por una parte, a la candidatura de De Otra Manera, liderada por José Miguel Fernández-Sastrón, la que, de momento en vano, ha exigido la nulidad de los últimos comicios; y, por otra, encaminada a tranquilizar los ánimos de la plataforma que pide una refundación de la entidad, que cuenta ya con más de 500 miembros y que tiene prevista una asamblea alternativa a la asamblea general extraordinaria que exigen a la junta directiva y que esta no está dispuesta a convocar. La cita es el próximo miércoles 20 en el Círculo de Bellas Artes.
Para prever otros futuros males, la junta directiva ha puesto el ojo también en uno de los proyectos más polémicos de Teddy Bautista, la red de teatros internacional Arteria, y que podría también ser objeto de investigación como lo fue la de la Sociedad Digital de Autores y Editores, centro de la trama de corrupción que acabó con nueve detenidos, entre ellos, Bautista, dentro de la denominada «Operación Saga». No son pocos los que han denunciado irregularidades en el desarrrollo de esta red. Para empezar, uno de sus principales arquitectos, Santiago Fajardo, quien decidió dejar de trabajar para la entidad, a pesar de ser amigo de Bautista, por no ver clara la gestión económica de los inmuebles. «Nombrar al Patronato de la Fundación y los órganos de Gobierno de Arteria con plenas facultades para la reforma integral de todas sus actividades (...) Las funciones ejecutivas en Fundación y Arteria las asumirá igualmente el presidente de la Comisión Rectora».
Por último, la junta directiva quiso despedir al ex presidente del consejo de dirección: «La junta directiva quiere manifestar su agradecimiento a Eduardo Bautista y expresar la mayor confianza en su honorabilidad». Termine como termine el proceso judicial para él, es muy improbable que vuelva a la entidad. Aunque resultara inocente, muchos tienen la sensación de haberse quitado un lastre de encima con su marcha, décadas después de que se pusiera al frente de la SGAE y la llevara a la situación que vive ahora: ser una de las entidades más odiadas de nuestro país.
Satrústegui, el sustituto
Viejo conocido del mundo cultural español, Miguel Satrústegui (Madrid, 1949), elegido ayer como presidente de la Comisión Rectora que dirigirá la SGAE hasta que se aclare la actual situación, fue director general de Bellas Artes en los años 80 y subsecretario de Cultura desde 1987. Como alto funcionario del Ministerio participó en operaciones de Estado como la compra del cuadro «La Marquesa de Santa Cruz», de Goya, en la que tuvo que negociar con el Reino Unido, y la negociación con el Barón Thyssen y su esposa para la permanencia de la colección en Madrid. Doctor en derecho y licenciado en Ciencias Empresariales, su presencia en la escena pública le viene de familia: su padre fue el dirigente monárquico liberal Joaquín Satrústegui. Tras su paso por el Ministerio, Miguel Satrústegui fue secretario del consejo de dirección de Prisa entre 2000 y 2009.
✕
Accede a tu cuenta para comentar