Un «inocente» sin libertad condicional

El fundador de Megaupload sigue en prisión preventiva hasta que un juez determine si es conveniente concederle la libertad condicional en un proceso de extradición a EEUU. En la vista, los medios han sido excluidos para evitar las aglomeraciones pasadas. La fiscal encargada del caso, Anne Toohey, advierte del riesgo que conlleva dejar en libertad a K. Dotcom al ser un hombre con acceso a medios económicos y con incluso transporte aéreo propio que facilitarían su fuga tras serle incautados pasaportes con varias identidades, numerosas tarjetas de crédito o incluso un arma de fuego ilegal encontrada en su domicilio que constituye un serio agravante en su condición de detenido.
La otra cara de la moneda, los abogados de Schmitz, argumentan que la actividad de la web ha sido malinterpretada, ya que se dedica al almacenamiento de archivos y no a una actividad delictiva como dice la fiscalía. Piden también la puesta en libertad bajo fianza, ya que el fundador de Megaupload pronto será padre de mellizos y su deseo es el de residir en Nueva Zelanda junto a su familia. Añaden además que las características de K. Dotcom, un hombre de 150 kilos, casi dos metros de altura y sin medios, aseguran ellos, para escapar de la ley, harían de su huida algo imposible. Además, dijo que la operación del FBI fue grandiosamente innecesaria. K. Schmitz se ha hecho oír. Solicita su puesta en libertad bajo fianza porque su web, comentó, no ejerce ninguna actividad delictiva, sólo permite la transmisión de archivos entre usuarios sin infringir ningun tipo de ley de propiedad intelectual. Es más, en un alarde de insolencia, alega que la página incluye opciones para los autores en caso de ver perjudicada sus creaciones en forma de copia o reproducción.