El PSOE presiona en la Cámara para apurar la vía de unión Unicaja-Cajasur

SEVILLA- Ni desde la Junta ni desde el PSOE-A esconden su preferencia por que el final de Cajasur, pese a la intervención por parte del Banco de España, sea la fusión con Unicaja. Y eso que este maridaje ha fracasado después de diez meses de negociaciones y tiene serios problemas de viabilidad debido a los solapamientos de mercado, un extremo que no se produciría con cajas de otras regiones. Aunque esta última opción no es del gusto del Gobierno andaluz, que ya se opuso a la fusión con CajaMurcia. El motivo de fondo es que de este modo la caja escaparía de la órbita de influencia del Ejecutivo que preside José Antonio Griñán. En cualquier caso, los nuevos administradores de la entidad designados por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) tendrán que preparar de forma acelerada –la Comisión Europea no quiere que el proceso se alargue más de seis meses– la vía de continuidad de la caja, que pasa por una eventual subasta o una fusión que dependerá de los compromisos de saneamiento que adquiera el Banco de España. Este escenario aún no está despejado.El portavoz parlamentario del PSOE-A, Mario Jiménez, maniobró ayer en el Parlamento para promover una declaración institucional de la Cámara apoyando que la fusión entre Unicaja y Cajasur siga siendo una «opción perfectamente válida» para gestionar el futuro de ambas entidades. La decisión de los grupos estaba cantada. IULV-CA respaldó la iniciativa, mientras que el PP se posicionó en contra. Jiménez señaló que con el rechazo a la declaración institucional, el presidente del PP-A, Javier Arenas, «se ha quitado la careta» –recoge Europa Press– y ha evidenciado que «en el fondo no apuesta por la fusión, situándose «de espaldas a la sociedad cordobesa y malagueña». Por la mañana, en rueda de prensa, también cargó duramente contra los seis representantes del Cabildo Catedralicio que optaron por la intervención al denunciar su «irresponsabilidad». El presidente andaluz, el lunes, los tildó de mantener una actitud «ruin».En cuanto a las posibles presiones de Griñán al Banco de España para que siga adelante la opción de Unicaja, el dirigente socialista señaló que por parte del Gobierno autonómico no ha existido interés alguno por presionar al Banco de España, que en este país «no lo presiona nadie». Su posicionamiento va en línea con lo expresado por la consejera de Presidencia, Mar Moreno, que el martes, tras el Consejo de Gobierno aseguró, a preguntas de LA RAZÓN, que «no le corresponde a la Junta o al presidente ni presionar ni descartar ninguna alternativa».

Salgado denuncia un «incumplimiento grave» de la entidadLa vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, subrayó ayer que la caja cordobesa incumplió «de manera grave» las medidas contempladas en el plan de actuación aprobado por el Banco de España, motivo por el que se decidió su intervención.Durante la sesión de control al Gobierno en el pleno del Congreso, Salgado respondió así a una pregunta de la diputada del PP Fátima Báñez, que cuestionó a la vicepresidenta segunda por la intervención y las consecuencias que ésta tendrá para el sistema financiero español.La titular de Economía subrayó que CajaSur representa un porcentaje «muy pequeño» del sistema financiero –acumula apenas el 0,6 por ciento de todos los activos– y defendió que la intervención es una medida de acuerdo a la ley. «Dejemos al Banco de España y al FROB que cumplan sus tareas», reclamó Salgado.El PP le reprochó asimismo que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, «no haya sido capaz de cumplir» con lo acordado con el líder de la oposición, Mariano Rajoy, en su última reunión sobre los cambios de la ley de cajas.