Nueva York

La Cámara de Representantes y el Senado aplazan las votaciones sobre la SOPA

La Cámara de Representantes y el Senado de Estados Unidos han aplazado este viernes la votación sobre la SOPA y la PIPA, respectivamente, dos polémicos proyectos de ley contra la piratería en Internet, situándoles en un limbo y generando dudas sobre su viabilidad futura. 

En el Senado, la votación sobre la Ley para la Protección de la Propiedad Intelectual (PIPA), que antes contaba con muchos apoyos tanto en el Partido Demócrata como en el Republicano, se iba a realizar el próximo jueves. Pero el líder de la mayoría en el Senado, el demócrata Harry Reid, ha anunciado que ha decidido posponerla "a raíz de los últimos acontecimientos", según la cadena CNN.

La Cámara de Representantes también ha paralizado su versión de ese proyecto de ley, la Ley para Detener la Piratería en Internet (SOPA). La Cámara Baja "aplazará la consideración del texto legislativo hasta que haya un consenso más amplio respecto a cuál debe ser la solución", ha informado el presidente de la Comisión de Justicia, Lamar Smith.

Varios congresistas que antes respaldaban estos proyectos han cambiado de postura recientemente por las numerosas críticas que se han vertido contra los mismos en Internet y en la calle.

Diez grandes empresas movilizaron a sus usuarios esta semana para que se pronunciasen en contra de la SOPA y la PIPA. Webs como Wikipedia y Reddit permanecieron cerradas el 18 de enero; se realizaron manifestaciones en Nueva York, San Francisco, Seattle y Washington y Google reunió más de siete millones de firmas para una petición contra los dos proyectos.

Smith ha dicho en un comunicado que ha escuchado "las críticas"y que se las toma "en serio". "Está claro que tenemos que revisar el enfoque para ver cómo abordar mejor el problema de los ladrones extranjeros", ha señalado en referencia a los ciudadanos de otros países que al realizar descargas ilegales perjudican a los autores estadounidenses.

Con la PIPA y la SOPA se pretende hacer respetar los derechos de autor imponiendo restricciones a las páginas web que tienen contenidos pirateados o que facilitan su difusión. En un principio, parecía que se iban a aprobar rápidamente; de hecho, la primera recibió el visto bueno unánime del Senado el pasado mayo.

Pero cuando la Cámara de Representantes empezó a trabajar en su versión del texto, la SOPA, las empresas de tecnología empezaron a ejercer presión para que no se aprobase.
Reid ha sugerido que aún es posible aprobar la PIPA. "No hay ninguna razón para que las quejas legítimas que han planteado muchas personas se puedan resolver", ha afirmado.

El líder de la mayoría demócrata en el Senado de EEUU, Harry Reid, anunció hoy que retrasará el voto de la ley antipiratería, conocida en su versión de la cámara alta como PIPA, tras la presión de los grandes gigantes de Internet, como Google y Wikipedia.

Reid informó de que retrasará la votación, programada para el próximo martes, hasta que el Comité Judicial del Senado avance más en un acuerdo sobre la polémica medida.

"Hemos logrado buenos progresos en los debates que hemos celebrado en los últimos días, y soy optimista en cuanto a que podamos llegar a un acuerdo en las próximas semanas", dijo Reid en un comunicado.

"No hay ninguna razón por la que las cuestiones legítimas planteadas por muchos acerca de este proyecto de ley no se puedan resolver. La falsificación y la piratería ha costado a la economía de Estados Unidos miles de millones de dólares y miles de puestos de trabajo cada año. Sólo la industria del cine produce más de 2,2 millones de empleos", añadió el líder demócrata.

El proyecto PIPA en el Senado, o SOPA en la Cámara de Representantes, obligaría a los motores de búsqueda, proveedores de dominios y empresas de publicidad estadounidenses a bloquear los servicios de cualquier página web del mundo que esté bajo investigación del Departamento de Justicia estadounidense por haber publicado material bajo derechos de autor.

Ello ha suscitado el temor de que queden bloqueadas páginas legítimas en las que los usuarios comparten contenidos.

El pasado día 18 la enciclopedia libre virtual Wikipedia en su versión en inglés y otras páginas de Internet cerraron sus servicios, y otras, como Google, colocaron señales de queja en protesta por la polémica ley.

Los fundadores de los grandes sitios de Internet remitieron hace unos días una carta al Congreso argumentando que la ley "va a crear un ambiente de miedo e incertidumbre tremendo para la innovación tecnológica, y perjudica gravemente la credibilidad de Estados Unidos en su papel como administrador de la infraestructura de claves de Internet".

Ante las presiones de los grandes gigantes de la red, la votación de la ley en la Cámara de Representantes ya se aplazó el martes, aunque podría someterse a una votación preliminar en el Comité Judicial en febrero, según el principal autor de la medida, el legislador republicano Lamar Smith.

En medio de las tensiones sobre la legislación, el jueves la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) anunció el cierre de la popular página de descargas MegaUpload por un presunto delito de piratería informática, y la detención de cuatro de sus ejecutivos, entre ellos su fundador, Kim Dotcom, en Nueva Zelanda.

En respuesta al cierre de la web, que servía a más de 180 millones de usuarios y había recibido más de mil millones de visitas desde su creación en 2004, el grupo de piratas informáticos Anonymous respondió con varios ataques a las páginas del Departamento de Justicia, del FBI y la productora Universal Music, entre otras.