Londres

La bolsa española cae el 084% y baja hasta niveles de agosto

La bolsa española bajó hoy el 0,84 por ciento y retrocedió hasta 10.150 puntos, precio de dos meses y medio atrás, afectada por nuevos ataques a la deuda de los países periféricos, a la caída de Wall Street por el sector tecnológico y a la mala acogida dada a algunos resultados (Telefónica).

Así, el índice de referencia del mercado español, el IBEX 35, cedió 85,90 puntos, el 0,84 por ciento, hasta 10.149,50 puntos, nivel desconocido desde finales de agosto. Las pérdidas acumuladas este año aumentan al 15 por ciento.

En Europa, con el euro a 1,366 dólares, antes del cierre nacional bajaban Milán, cerca del 1 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 0,45 por ciento, y París, el 0,4 por ciento, mientras que Fráncfort ganaba el 0,1 por ciento, y Londres, el 0,05 por ciento.

La bolsa española empezó esta jornada, marcada por los resultados y previsiones de Cisco, la reunión del G-20 y la crisis de la deuda de los países de la periferia europea, sin rumbo definido. China comunicaba que la inflación crecía ocho décimas, hasta el 4,4 por ciento en octubre.

Mientras las plazas europeas registraban pequeñas ganancias, el mercado nacional incurría en pérdidas y se despedía del nivel de 10.200 puntos, perjudicado por la caída de algunos grandes valores, como Telefónica y Repsol, cuyos resultados entre enero y septiembre no gustaban a los inversores.

El elevado precio del petróleo Brent, que abría el día cerca de 90 dólares el barril, debido a la política energética China, no servía para impedir la caída de la bolsa, que seguía, en parte, la evolución del euro, que se depreciaba desde 1,38 dólares de la apertura. En la evolución del tipo de cambio de la divisa única influían las declaraciones de las autoridades estadounidenses sobre la posición relativa del dólar y la evolución de la deuda en Europa.

Esta estaba condicionada por las declaraciones del presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, dispuesto si fuera necesario a acudir al rescate de Irlanda, que este país no ha solicitado, lo que elevaba el rendimiento de su deuda a niveles históricos.

La apertura a la baja de Wall Street -caía el 1 por ciento-, perjudicada por las previsiones de Cisco y la caída del sector tecnológico, acercaba a la bolsa a 10.050 puntos. Al final de la sesión, el mercado neoyorquino moderaba sus pérdidas, algunas plazas europeas subían y la bolsa española, con el euro en 1,365 dólares, nivel de comienzos de octubre, concluía en precios de finales de agosto.

Excepto Repsol, que subió el 0,25 por ciento, el resto de los grandes valores bajó: Telefónica, el 1,64 por ciento; Iberdrola, el 1,5 por ciento; BBVA, el 0,75 por ciento, y Banco Santander, el 0,43 por ciento. La mayor caída del IBEX correspondió a OHL, el 6,56 por ciento, seguida de Mapfre, con un retroceso del 4,19 por ciento, en tanto que ACS, que podría presentar hoy la opa sobre Hotchief, cedió el 2,97 por ciento.

Sacyr encabezó las ganancias de las empresas del IBEX con una subida del 10,51 por ciento después de anunciar una ampliación de capital de 400 millones de euros casi cubierta por los miembros de su consejo, mientras que FCC avanzó el 3,11 por ciento, e Inditex, el 1,4 por ciento. En el mercado continuo destacó la caída del 10,21 por ciento de Inmobiliaria Colonial, seguida de Prisa, que cayó el 8,5 por ciento, mientras que tras Sacyr, la constructora San José consiguió el mayor avance, el 6,73 por ciento.

Poco antes del cierre del mercado de deuda la rentabilidad del bono español a diez años subía doce centésimas y se situaba en el 4,6 por ciento -el diferencial con la deuda alemana se acercaba al máximo histórico de 221 puntos básicos-, mientras que el efectivo negociado en bolsa se situó en 5.066 millones, de los que algo más de 2.150 millones los intermediaron inversores institucionales.