Un ladrón con remordimientos paga un martillo 30 años después con intereses

Un ladrón que no ha desvelado su nombre ha enviado a la ferretería Central Contractors Supply, en Johnstown, Pensilvania (Estados Unidos), un sobre con 45 dólares, junto a una nota manuscrita en la que decía que enviaba el dinero para pagar un martillo que robó hace unos 25 ó 30 años.

Según ha explicado a la prensa Lynne Gramling, dueña de la tienda junto con su padre, la carta llegó el 6 de diciembre, y en ella había una confesión del ladrón. "Sabía que estaba mal, pero lo hice de todos modos. Adjunto 45 dólares para pagar el martillo y un poco más por los intereses. Lamento haberlo robado, pero he cambiado mi forma de ser", afirma en la nota.

Tras recibir el dinero, la propietaria de la tienda ha llevado el dinero a un centro comercial de los alrededores, en el que su padre trabaja como voluntario del Ejército de Salvación.