La figura del «trainer»

MADRID- El modelo alemán está basado en la experiencia y en su efectividad. La clave de la FP dual germana es la convocatoria de plazas. Al contrario que en España, no son los centros de enseñanza los que ofertan las plazas, son las propias empresas las que «buscan nuevos aprendices». Con este método se regula mucho mejor el mercado laboral y el número de alumnos se ajusta a las necesidades del país. En datos: Alemania cuenta con un 56 por ciento de estudiantes de Formación Profesional frente al 30 por ciento español. Así, otra de las diferencias del sistema alemán es la alternancia del alumnado; es decir, acuden a trabajar y al centro de estudios a lo largo de la semana de forma alterna. De esta forma ponen en práctica casi al instante los conocimientos que adquieren. Por último, la figura del «trainer» no se conoce en nuestro país, se podría traducir como el «formador de empresa».