Cospedal: «En el Congreso del PSOE ha salido elegida la continuidad»

–¿Qué le ha parecido el Congreso del PSOE?
–Ha sido un congreso no sobre ideas, sino sobre personas. Casi la única propuesta que ha habido ha sido sobre la reforma del concordato con la Santa Sede, lo cual no me parece una gran aportación. Se han limitado a elegir a su secretario general y así lo han hecho.

–¿Rubalcaba hará una oposición con sentido de Estado?
–No lo sé. Eso se irá viendo día a día con su actuación.

–Ustedes le preferían a él como rival, ¿no?
–Nosotros no preferíamos a nadie en concreto, porque ha sido un congreso en el que se proponía continuidad y ha salido elegida la continuidad.

–¿El PP está dispuesto a renunciar a las posturas de máximos para buscar el acuerdo con este PSOE que lidera Rubalcaba?
–Nosotros vamos a practicar una política opuesta a la que siguió el PSOE en el Gobierno. Y esto implica, entre otras cosas, buscar los grandes acuerdos de Estado con el PSOE. En Exteriores, en energía, en materia social… Queremos pactar las reformas, pero sentarse a hablar no puede servir de excusa para no hacer nada. El Gobierno tiene la responsabilidad de gobernar y vamos a hacerlo.

–¿Está de acuerdo con Mas en que es imposible reducir el déficit al 4,4 por ciento sin engañar?
–No, en absoluto. Los engaños de algunos nos han traído hasta aquí. Ahí están esos dos puntos de déficit de diferencia entre las previsiones del anterior Gobierno y la realidad. Y ahí están también las cifras que nos decían que había en algunas comunidades, empezando por Cataluña, y las que hay de verdad. Nosotros nos hemos comprometido a cumplir el objetivo de déficit que marcó Europa, y lo vamos a hacer.

–¿Aunque la UE mantenga el actual?
–Cumpliremos el déficit que establezca la UE, el Ecofin y la Comisión Europea. Sea el que sea.

–Han advertido de que en el camino todavía quedan decisiones difíciles y duras. ¿Como cuáles?
–Ya hemos tomado decisiones muy difíciles…

–Le preguntaba por las que faltan.
–Algunas de ellas se esperan desde hace tiempo, y tendrán un efecto inmediato en la reactivación económica. Por ejemplo, España necesita una reforma laboral que garantice que los empresarios no tengan miedo a contratar y que los trabajadores puedan acceder a un contrato indefinido. Y lo mismo ocurre con la necesaria reforma del sistema financiero que va a garantizar que vuelva a fluir el crédito. Cuando conozcamos la previsión de crecimiento de la UE, a finales de febrero o principios de marzo, el Gobierno presentará los Presupuestos Generales del Estado y contará cuál es la situación.

–¿Con la reforma laboral se creará empleo?
–Sí. Servirá para incentivar la contratación. Servirá para que los empresarios pierdan el miedo a contratar y para que aquellos que quieren trabajar puedan hacerlo. La rigidez del mercado laboral es tan grande que ha impuesto dos únicas relaciones laborales: los trabajadores con contrato fijo y prestaciones; y los que tienen un contrato temporal y ningún tipo de protección. Esa injusta dualidad tiene que terminar y eso será bueno para el empresario y para el trabajador. También será bueno que pueda haber un descuelgue razonable de los convenios colectivos. Algunos pensarán que van a perder ciertas posiciones, pero hoy es el momento de ser generosos y tener grandeza de miras. Los últimos datos de paro reflejan que la reforma laboral del anterior Gobierno no ha valido para nada.

–¿Qué hay que hacer para que los empresarios pierdan ese «miedo a contratar»? ¿Rebajar más el despido?
–Eso se consigue con una negociación colectiva que sea sensata o eliminando muchas de las trabas administrativas que impiden un mercado único y que frenan la actividad de los emprendedores. El Gobierno ya ha anunciado una ley de emprendedores que será muy importante para las pymes.

–¿Entonces la reforma laboral no establecerá un contrato con menos días por despido?
–No estoy en la mesa de negociación.

–Seguro que alguna información tiene…
–La reforma será buena para los trabajadores porque permitirá que más hombres y mujeres tengan un contrato de trabajo.

–¿Hay que revisar el sistema de prestaciones, por ejemplo, para sancionar más a aquellos que no aceptan una oferta de empleo?
–En ese ámbito, como en otros, España necesita luchar contra el fraude.

–Como presidenta de una comunidad en una situación económica delicada, ¿apoya la idea de Esperanza Aguirre de que las autonomías no pueden asumir más gasto, y que incluso deberían devolver algunas competencias?
–Hay que acabar con las duplicidades de funciones, y en eso está trabajando el Ministerio de Hacienda y la Vicepresidencia. La época de bonanza ha llevado a que distintas administraciones no hayan gestionado con la obligada eficiencia el dinero público. Todavía se pueden hacer muchas cosas en el ámbito de la mejora de la gestión que ahorrarían mucho dinero al contribuyente y a las comunidades autónomas, que soportan, cierto es, el mayor gasto social con diferencia.

–¿Pero pueden mantener ese gasto social sin más financiación?
–Hay que hacer una revisión del sistema de financiación autonómica. El PSOE lo reformó y nunca lo cumplió, dejándonos un problema muy importante a las comunidades. En él tiene que estar incluida la financiación de los servicios sociales y de la Sanidad.

–¿Son sostenibles las actuales prestaciones sanitarias sin introducir alguna fórmula de copago?
–Antes de imponer el copago pueden hacerse muchas mejoras en la gestión. Y eso lo saben también los presidentes autonómicos. Cuando se habla de copago tendemos a olvidar que la Sanidad ya la pagamos todos con nuestros impuestos. El ciudadano tiene derecho a que se administren de la mejor manera sus impuestos antes de exigirle más. Hace falta un plan nacional y tiene que acordarse entre el Estado, las comunidades y las administraciones locales.

–Y lo de que paguen más los que más tienen, ¿qué le parece?
–Eso ya se está corrigiendo en algunas comunidades. En muchas, empezando por la mía, ha habido libros de texto gratis para todos, y eso es un disparate. Como también lo es que, con independencia de la renta, tengan transporte interurbano gratis todas las personas mayores de determinada edad o los menores de determinada edad. Una política social viable exige un sistema que cuide al que no tiene recursos para acceder a los servicios y que aquellos que sí pueden acceder no reciban el mismo trato de favor.

–Ustedes han subido los impuestos, incumpliendo su programa, por las circunstancias que se han encontrado, según han explicado. Y también Zapatero apeló a las circunstancias para justificar sus ajustes de mayo de 2010. ¿Qué diferencia hay entre unas circunstancias y las otras?
–Cuando el PSOE aprobó los ajustes de mayo, el PP le ofreció una propuesta alternativa para que no tuviera que rebajar las pensiones. Pero el recorte era lo fácil; lo difícil era mejorar la gestión, quitar duplicidades en personas y organismos, suprimir entidades públicas…, y eso es lo que está haciendo el PP. Nosotros recibimos una herencia en la que se nos dijo qué iba a haber un 6 por ciento de déficit y va a rondar el 8%. Decir que las circunstancias son las mismas es mentir.

–¿Ha subido los impuestos en Castilla-La Mancha?
–No.

–Por cierto, ¿cree que hay que darle la vuelta a la herencia de Zapatero?
–España necesita un amplio paquete de reformas: en energía, en el sistema laboral y financiero, en el sistema educativo, en infraestructuras… El Gobierno está afrontando los problemas más acuciantes y Rajoy apenas ha cumplido un mes como presidente del Gobierno y ya están listas las reformas laboral y financiera. Además se ha hecho un ajuste de 15.000 millones de euros y 9.000 de ellos han salido de la Administración central. El Gobierno está trabajando rápido y bien.

–Ya, pero, por ejemplo, ¿usted cree que hace falta corregir el modelo de España social que deja el PSOE?
–Creo que hay que hacer una reforma importante, pero no puede imponerla el Gobierno, sino que debe ir interiorizándola la sociedad española. Hay que recuperar la cultura del esfuerzo, que tan buenos resultados dio a España en la época de la Transición o en la entrada en el euro. Hay que volver a vivir en la realidad, asumir que las cosas importantes cuestan trabajo, que hay que pasar épocas malas para llegar a las buenas… Y todo eso tiene que empezar a recuperarse desde las escuelas y hay que aplicarlo también a la gestión pública.

–¿La ley de plazos es mejorable o hay que derogarla?
–El ministro de Justicia ya ha fijado la posición del Gobierno al respecto.

–¿Y está de acuerdo con que se vuelva a exigir receta para la píldora del día después?
–También la ministra de Sanidad ya ha explicado que van a pedir un informe técnico y científico para conocer cuál es la situación.

–¿Para qué tiene que servir el Congreso del PP de Sevilla?
–Para que el PP se refuerce y sirva con más intensidad como instrumento de conexión entre el Gobierno y los ciudadanos. Y para dotar al partido de los instrumentos necesarios para apoyar a un Gobierno que se ha encontrado una situación muy difícil.

–¿Se ve capacitada para seguir como secretaria general y presidenta de Castilla-La Mancha?
–Yo me someteré a lo que decida el Congreso y a la propuesta que realice Rajoy. Trabajamos mucho para llegar a la Presidencia de Castilla-La Mancha, y hoy mi pasión es seguir dedicándome en cuerpo y alma a ayudar a mi comunidad a salir del pozo en el que me la encontré. También llegué a la Secretaría General en un momento muy delicado y hoy estoy muy satisfecha del trabajo que hemos hecho. En cualquier caso, cuando uno está acostumbrado a trabajar mucho, los trabajos se pueden compatibilizar.

–¿Camps vuelve a contar con la plena confianza de la dirección del partido?
–Siempre hemos defendido la inocencia de Camps y nunca le hemos colocado en una mala situación en el partido. Ni se le ha abierto un expediente ni suspensión… Nos alegramos de que su inocencia haya sido corroborada por un jurado popular. Este partido confió en él ante un proceso en el que la mayor sanción era la pena de banquillo.

–Quedarse fuera de la Generali-tat, después de haber ganado por mayoría, también es una «pena», ¿no? Usted se preguntó en alto, al conocer la decisión del jurado popular, qué quién le iba a reponer ahora la honorabilidad. ¿Lo hará de algún modo el PP?
–Camps tomó una decisión voluntaria para su mejor defensa y para no perjudicar a su partido. Eso le honra y le va a honrar siempre. Esa decisión fue de una gran generosidad, que nadie, en ningún otro partido, ha tenido hasta ahora.

–¿Y esa generosidad no le hace merecedor de volver a la primera línea política?
–Hay que respetar su decisión. Él ha manifestado que quiere disfrutar de una etapa de tranquilidad después de la situación tan difícil por la que ha tenido que pasar. Hay que respetar su decisión de estar tranquilo y luego ya será lo que tenga que ser.

–¿González Pons seguirá en el «internado» después del Congreso de Sevilla?
–Él me explicó que esas declaraciones fueron una broma. Todo el que venga a esta casa puede ver que se está trabajando.

–¿Cree que merece que le toque algo en el reparto del Congreso?
–Es vicesecretario de Comunicación y número uno por Valencia.

–¿Y seguirá en la primera línea?
–Esa decisión depende del Congreso.