Mas sigue sin ver pruebas sobre la financiación irregular de CDC

Barcelona- En Convergència tienen claro que «la mujer del César no sólo debe ser honrada, sino parecerlo» y aplicándose esta máxima han optado por negar todos los indicios que apuntan a una presunta trama de financiación irregular de CDC a través del Palau de la Música, incluido el informe pericial de la Agencia Tributaria que constata que la empresa Ferrovial pagó a Félix Millet comisiones de obra pública encargada por CiU. El empresario actuaba de intermediario y hacía llegar estas comisiones a los nacionalistas, según el informe.

A pesar de esto, el líder de CiU, Artur Mas, no tuvo reparos ayer en afirmar que «no hay ninguna prueba» que demuestre que haya podido existir algún tipo de vinculación irregular entre su partido y el empresario Félix Millet. Es más, el líder nacionalista exigió que la Agencia Tributaria revise «una por una» todas las adjudicaciones de obra pública que la Generalitat hizo a Ferrovial, convencido de que el informe de la Agencia Tributaria no se ha hecho correctamente. Desde Convergència niegan tajantemente que el dinero entregado por Ferrovial a Millet fuera una comisión del cuatro por ciento destinada a engrosar las arcas de CDC.

Críticas de los partidos
Pese a los argumentos esgrimidos por los nacionalistas, todos los partidos catalanes coincidieron en exigir responsabilidades, seguros de la existencia de irregularidades en su financiación. Incluso el presidente de la Generalitat, José Montilla, reprochó a los nacionalistas su comportamiento, convencido de que el informe de la Agencia Tributaria constata la existencia de «algo más que indicios» de financiación irregular de CDC a través del Palau.

El informe de la Agencia Tributaria encargado por el juez instructor del «caso Palau» Juli Solaz aporta nuevos datos en la relación entre el Palau y Convergència, lo que ha encendido los ánimos de los partidos que, como es el caso del PP, exigieron a Mas «ceses» en las filas nacionalistas. Entre los nombres que barajan estarían los del secretario general adjunto de CDC, Felip Puig, y del diputado Pere Macias, por «haber mentido» en la comisión de investigación del Parlament sobre la irregularidades del Palau. Por su parte, ERC solicitó a la Justicia celeridad en sus pesquisas y que emita conclusiones antes de las elecciones catalanas de otoño. Otros, como el director general de Interior y miembro de ICV, Joan Boada, señalaron directamente al ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol como responsable de lo que el PSC tacha ya de «trama de corrupción».