PSOE:Te lo prohibimos y te multamos por tu bien por J GARCÍA LEGAZ*

Prohibido fumar. Prohibido comer hamburguesas. Intento frustrado de prohibir el consumo de vino. ¿Qué tienen en común todas esas prohibiciones?: el supuesto objetivo de mejorar la salud de las personas. «Te lo prohibimos por tu propio bien», podría haber afirmado José Luis Rodríguez Zapatero. En realidad, el aún inquilino de La Moncloa también podría haber afirmado: «Estás capacitado para votarme, pero de tu salud tengo que ocuparme yo, porque tú estás incapacitado para velar por ella». Preservar la salud de cada ciudadano, «lo más importante para un gobierno», Rodríguez Zapatero dixit, es algo que, en opinión de los socialistas, está en peligro si lo dejamos en manos del propio ciudadano, al que todo socialista considera irresponsable.

Al mismo tiempo, los socialistas autorizan la dispensación a adolescentes de la píldora del día después, uno de los «nuevos derechos» del diccionario PSOE. Dos años después, ya tenemos estadísticas de salud, y se constata empíricamente que muchos adolescentes han sustituido el preservativo por la píldora del día después, con el consiguiente incremento de contagios de enfermedades de transmisión sexual. La pregunta es obligada: ¿no era la salud lo más importante para el gobierno?

El prohibicionismo socialista acaba de reeditar nuevas modalidades de atropellos a la libertad: prohibido conducir a más de 110 kilómetros por hora en autovías y autopistas. Si no lo haces, te quitamos tu dinero. En esta ocasión, la razón es que ahorres energía y dinero, porque tú, querido ciudadano, para los socialistas, decidiendo por ti solo, eres un desastre. Por eso te quitan mediante una multa el dinero que tanto te cuesta ganar. Zapatero te dice: «Te quito tu dinero por tu bien, porque no sabes gastarlo. En lugar de gastártelo en llegar antes a casa circulando a 120 km/h para estar un rato más con tu familia y tus hijos, te lo quito yo mediante una multa, y lo gasto mejor». Por ejemplo, en aumentar las subvenciones a los sindicatos o en ayudas al cine.

El prohibicionismo socialista se traslada también a la negación de la libertad de elección en la educación y en los servicios de salud. Zapatero te cobra impuestos y dice que con eso paga la educación de tus hijos, pero después te prohíbe elegir el centro educativo al que llevarlos. Para eso los socialistas también te consideran un incapacitado. O lo llevas al que ellos dicen o, si eres tan irresponsable de elegir otro centro distinto al que un socialista a quien no conoces elige por ti desde un despacho, el colegio te lo has de pagar de tu bolsillo y, por supuesto, no te devuelven el dinero de tus impuestos. Ellos, los socialistas, saben mejor que tú cuál es el colegio que les conviene a tus hijos.

Lo mismo ocurre a la hora de elegir médico o centro de salud. A esos efectos, te consideran un discapacitado, de modo que ellos se convierten en tu tutor: los socialistas, una vez más, eligen por ti. Por esa misma razón, porque para el gobierno socialista eres un irresponsable, te prohíben disponer de tu dinero. Simplemente, porque, en su infinita arrogancia, los socialistas creen que tú, ciudadano, no sabes administrarlo. Por eso te suben los impuestos una y otra vez: porque creen que ellos gastan tu dinero mejor que tú. Por ejemplo, contratando centenares de asesores en La Moncloa.

Jaime García Legaz
Diputado a Cortes por Murcia