Manifestaciones violentas

Todos contra la delegada

Políticos y Policía apuntan a Dolores Carrión como responsable de los altercados. Autorizó el recorrido de la marcha «anti-Papa» pese a los informes negativos

Un sindicato policial pide el cese de la delegada del Gobierno
Un sindicato policial pide el cese de la delegada del Gobiernolarazon

Fue la crónica de una manifestación anunciada. La delegada del Gobierno, Dolores Carrión, cedió ante las presiones de los organizadores de la marcha «anti-Papa». Consintió nuevamente una concentración que concluyó con múltiples altercados, una situación que viene sucediendo en cada concentración «indignada». Tras la tormenta, son muchos los detractores que piden su dimisión.

Desde que se fundara el movimiento 15-M en mayo, la Delegación de Gobierno de Madrid ha dejado a sus integrantes pasear su «indignación» por las calles de la capital con absoluta impunidad. Durante las semanas previas a la celebración de la JMJ, el colectivo mantenía en secreto su postura sobre la visita del Papa. Sin embargo, bastó una manifestación convocada por colectivos laicistas para tomar de nuevo la plaza que consideran de su propiedad. Se volvieron a vivir altercados entre la Policía y los «indignados», pero en esta ocasión con peregrinos de por medio. «Ayer dimos un espectáculo grotesco y penoso con chavalines que no sabían por qué les escupían, les zarandeaban y les insultaban», comunicó Unión Federal de Policía. Desde delegación de Gobierno se ordenó cerrar el metro de Sol y desalojar la plaza, lo que desembocó en la carga policial ante los violentos. Pero los policías están hartos de esta situación, ya que explicaron que la delegada «se saltó el informe negativo del CNP, el Ayuntamiento de Madrid, la Abogacía del Estado y el TSJM», advirtiendo de que sería una temeridad autorizar a los laicistas marchar por Sol, dado que ese punto de la capital estaría abarrotado de peregrinos y, por tanto, los altercados estarían garantizados. Tal es el hartazgo de los agentes –quienes llevan tres meses soportando la indecisión de Carrión– que el secretario general de este sindicato, Alfredo Perdiguero, solicitó ayer por escrito al presidente del Gobierno el cese de la delegada en la Comunidad. Por su parte el Sindicato Unificado de Policía (SUP) también habló de la «irresponsabilidad» de Carrión y pidió a la delegada que «se tome en serio la seguridad».

Desde la Confederación Española de Policía (CEP), recalcaron que los criterios de «la máxima responsable del desorden público en Madrid» siempre «se alejan de los parámetros técnicos policiales generando incidentes que ya cansan a los funcionarios del CNP y a toda la sociedad madrileña». Como los dos anteriores sindicatos, la CEP también critica la «caótica y vacilante gestión de Carrión», llegando a contabilizar éstos como los enésimos incidentes en Sol. Asimismo denuncian la permisividad que la delegada ha practicado siempre con el movimiento 15-M, un criterio muy discutido por parte del sindicato policial. «Carrión está logrando ser recordada como la mayor responsable del desorden público», acusan.


Tres meses de choques con la Policía
Los sindicatos policiales han dado varios avisos a la delegada de Gobierno, Dolores Carrión, sobre «el caos total» que reina en la capital por su ineficaz toma de decisiones ante el movimiento 15-M. La Policía ha mantenido un pulso con la Delegación de Gobierno, que no ha sabido parar a tiempo la oleada de altercados que se han originado en las inmediaciones de Puerta del Sol, convirtiendo ésta en el fortín del colectivo. Y para muestra, un botón. Días previos a la JMJ, Carrión anunció que el movimiento reivindicativo no interferiría en la visita del Papa.