Murcia

La Policía guarda el ADN de 183000 personas recogido en sucesos

El laboratorio central de ADN de la Policía Nacional almacena el perfil genético de 183.000 personas a partir de las muestras biológicas halladas en los escenarios de los crímenes, como sangre, saliva, semen o cabellos, unos datos que han permitido a este Cuerpo esclarecer 7.500 delitos.

Desde homicidios y violaciones hasta actos de terrorismo han conseguido esclarecer estos perfiles que se procesan e incluyen en una base de datos que está en funcionamiento desde 2007.

Los especialistas en inspecciones oculares de la Comisaría General de Policía Científica recogen estas muestras que más tarde son procesadas e incluidas en una base de datos.

El ADN ha permitido aclarar recientemente varias investigaciones, como el arresto de un atracador que acuchilló a tres trabajadores de una bolera de Paterna, la detención en enero de un agresor sexual cinco años después de haber perpetrado el crimen o la imputación de tres violaciones cometidas en una zona de ocio de Murcia a un joven que había sido detenido por otros hechos.

El análisis del ADN consiguió sólo en 2009 resolver 194 agresiones sexuales, 140 homicidios y trece delitos relacionados con el terrorismo, entre un total de 2.450 delitos esclarecidos con esta técnica policial.

En veinte años de historia, el ADN se ha consolidado como una de las principales herramientas en la investigación de los delitos más graves y, de hecho, sólo en los últimos cinco años, el número de delincuentes identificados gracias a las muestras biológicas se ha multiplicado por cinco.

Esta técnica policial decisiva en la resolución de los crímenes comenzó como tal en los años 90 y dos décadas después se ha consolidado como una importante herramienta en la resolución de delitos graves.

Las estadísticas sobre esclarecimiento de los casos gracias al estudio genético de violaciones, homicidios, otras infracciones contra las personas o delitos contra el patrimonio, se han incrementado.

Ese incremento de los delitos ha sido especialmente intenso desde 2009 ya que frente a las 142 agresiones sexuales resueltas en 2008, el año 2009 finalizaba con un 36 por ciento más, un 72 por ciento en el caso de los delitos de homicidio.

Y esto se debe al elevado número de inspecciones oculares realizadas por los técnicos de Policía científica por toda España y a la capacidad de analizar e interpretar los vestigios y evidencias recogidos por los avances de la tecnología y la implantación de laboratorios biológicos y químicos en distintas provincias.

La base de datos policial sobre identificadores obtenidos a partir del ADN vio la luz en noviembre de 2007 tras la aprobación de la correspondiente ley orgánica.

Desde entonces, se han añadido 183.000 fichas de sospechosos, detenidos o imputados, en hechos que afecten a la vida, la libertad, la indemnidad o libertad sexual, la integridad de las personas, el patrimonio o en casos de delincuencia organizada.

Gracias al Tratado de Prüm, suscrito por España, Alemania, Austria, Bélgica, Eslovaquia, Eslovenia, Francia, Holanda y Luxemburgo, las bases de datos de ADN, huellas dactilares y balística son también intercambiados entre las policías europeas, lo que facilita la identificación de los criminales que se mueven en la UE.

En un futuro, los ficheros de los 27 países de la Unión Europea estarán interconectados.