Abucheado en su bastión

Muy lejos parece quedar el tiempo en el que Tomás Gómez podía presumir de ser el político más querido de Parla en su calidad de alcalde más votado de España. El secretario general de los socialistas madrileños experimentó ayer en primera persona el creciente descontento existente entre los parleños tanto hacia él como hacia a su sucesor en el consistorio, José María Fraile. Fue a la salida del acto electoral que el PSOE celebró en la Casa de la Cultura de la localidad. Cerca de 200 personas, entre trabajadores municipales y vecinos, abuchearon e increparon a Gómez, al que responsabilizan, como a Fraile, de los despidos aprobados en el Ayuntamiento. Escoltado por compañeros de partido y por agentes del orden, Gómez tuvo que escuchar de sus vecinos cánticos que ilustran de forma clara hasta qué punto llega el malestar ciudadano: «Se va a acabar, se va acabar la dictadura de Tomás». Este episodio, sin embargo, no es algo nuevo para el líder del PSM. Según ha podido saber LA RAZÓN, Gómez ya tuvo que salir esta semana escoltado de una conocida tienda deportiva de Parla ante los reproches y acusaciones de varios de los clientes. La caída en desgracia de los socialistas en uno de sus tradicionales bastiones vivió su primer capítulo en las municipales de mayo –en las que el PP, por primera vez en la historia, empató a once concejales con el PSM– y podría tener su punto culminante el domingo, si, como se espera, Rajoy suma en Parla más votos que Rubalcaba.