El equipo de cerca

Jorge Moragas / Director de gabinete de Presidencia del Gobierno; por Antonio López-Isturiz
Nos conocimos en 1999. Él estaba de adjunto al Secretario General de Presidencia, Javier Zarzalejos, y yo era el ayudante José María Aznar. Desde entonces, hemos mantenido una buena relación, él desde la secretaría internacional del partido y yo desde la secretaria general del PP europeo. Es una persona de trato natural, afable, con la que se puede hablar sin tensiones. En las reuniones genera tranquilidad, no se altera y sabe trabajar en equipo. Tiene gustos sencillos, sin estridencias, ni en su forma de vestir ni en su forma de ser. La palabra dada la cumple, algo que en política es importante. Conoce bien los asuntos internacionales. Se mantuvo leal a Rajoy en épocas muy duras y siempre aporta soluciones. Conserva de Barcelona el hábito de desplazarse en moto a todas partes y la utiliza siempre que puede por Madrid.

Álvaro Nadal / Jefe de la Oficina Económica de La Moncloa; por Ramón Aguirre
Es rabiosamente joven y está espectacularmente preparado en el aspecto académico y cultural. Recuerdo su etapa de gran contribución en el discurso económico del vicepresidente Rodrigo Rato. Junto con su hermano Alberto, ambos economistas del Estado, eran asesores técnicos y a todo el equipo económico nos tenía sorprendidos por su sabiduría. Después se incorporó al grupo popular. Cuando subía a la tribuna su discurso era muy académico, pero con el tiempo, logró combinarlo con las pinceladas del debate político. Es un lujo de persona y me encanta que de vez en cuando me ceda algunos minutos de conversación, porque ésta es rica y llena de matices. Se desplaza hasta el Parlamento en una bicicleta motorizada. Siempre está pendiente de su familia y todos los jueves se coge un vuelo a Berlín para estar con su mujer y sus hijos.

José Luis Ayllón / Secretario de Estado de Relaciones con las Cortes; por Pilar Ferrer
Autentico número dos de Soraya. José Luis Ayllón, diputado por Barcelona, pertenece a ese grupo de jóvenes «cachorros» de Nuevas Generaciones de Cataluña, bien formados y con ganas de hacer cosas. En el XVI Congreso del PP en Valencia, que aupó a Rajoy como líder absoluto del partido, este joven extremadamente discreto, de mirada profunda, tras unas gafas que delatan su perfil de estudioso empedernido, se fraguó la confianza con la hoy todopoderosa vicepresidenta del Gobierno. Ayllón no era nuevo. Diputado en el Congreso desde la VII Legislatura, fue asesor del entonces presidente del gobierno, José María Aznar y uno de sus «fontaneros» en la sombra más cualificados. Abogado de profesión, colaborador de firmas empresariales prestigiosas en Cataluña, llegó a ser secretario de Comunicación del partido. Culto, reservado y afable, Ayllón ha trabajado a destajo en esta Legislatura.

Carmen M. Castro / Secretaria de Estado de Comunicación; por Javier del Castillo
Su capacidad de trabajo y su lealtad son las señas de identidad de esta periodista gallega, que dejó Onda Cero hace unos años para trabajar al lado de Rajoy. No era una decisión fácil, pero la adoptó con todas las consecuencias. Carmen Martínez Castro, la nueva secretaria de Estado de Comunicación sabía que le esperaba una dura travesía por el desierto, hasta alcanzar los jardines de La Moncloa. Sin embargo, afrontó ese reto con la misma tenacidad e ilusión con que madrugaba cada día para preparar las entrevistas políticas del programa de Carlos Herrera. Cuando llegó a Onda Cero, en 2002, para hacerse cargo de los informativos de la cadena, su vida y su tiempo eran la radio. Carmen sabe muy bien que los resultados se consiguen con esfuerzo y sacrificio. Incluso con una sonrisa. Como diría Herrera: «Buenos días, Carmen, me alegro».

Jaime García Legaz / Secretario de Estado de Comercio; por Javier Fernández-Lasquetty
José María Aznar suele decir que las ideas tienen consecuencias, y que las buenas ideas –basadas en principios y valores– suelen traer buenos tiempos. Jaime García-Legaz pertenece a esa misma escuela. Es un economista y político de sólidas convicciones liberales que reúne formación, experiencia, capacidad de análisis e impulso reformista. Formó parte del equipo de jóvenes asesores liberales del presidente Aznar que tanto aportó para definir y llevar adelante una política que generó bienestar y prosperidad para nuestra nación. Ahora España lo necesita aún más que entonces, porque ocho años de socialismo no se remedian tan fácilmente. García-Legaz es capaz de ayudar mucho en esta tarea a Mariano Rajoy y a su ministro De Guindos. La Fundación FAES ha sido en estos años un vivero de ideas y análisis de política económica. El nuevo secretario de Estado de Comercio ha sido su secretario general hasta ahora. Suya fue la idea de crear un Observatorio Económico –presentado en LA RAZÓN– que reuniera a los más consistentes economistas españoles, entre ellos Luis de Guindos. Bajo la batuta del profesor Velarde, el Observatorio Económico de FAES fue el único foro público de análisis económico que señaló el rumbo suicida de la política socialista, tres años antes de que la inmensa crisis empezara a manifestarse en nuestro país. Cuando ya España se hundía, García-Legaz ha impulsado foros de reflexión y documentos de propuestas con buenas ideas para remontar la caída en picado de la economía española. La confianza en la libertad individual, en el derecho de propiedad y en el gobierno limitado –tres premisas extraídas de la lectura de economistas como Adam Smith, Hayek, Mises o Friedman– forman parte siempre del sólido cimiento de las ideas de Jaime García-Legaz. El nuevo responsable de la política comercial española conoce bien los efectos letales de las restricciones al libre comercio. Ha escrito sobre ello en las publicaciones de FAES. Sabe también que la apertura de los mercados genera competencia, estimula la innovación, y ofrece mejores precios al consumidor. Junto con Pedro Schwartz y Francisco Cabrillo lanzó una de las propuestas más importantes e influyentes salidas de España en la última década: la creación de un área atlántica de prosperidad, que liberara de todo tipo de restricciones, distorsiones y barreras al flujo de mercancías, bienes y servicios entre Europa y América. Para todo ello, Jaime García-Legaz despliega una enorme capacidad de trabajo. Sus compañeros de FAES, del Grupo Parlamentario Popular, o sus electores de Murcia lo saben bien. Tenemos una persona muy sólida en el equipo económico de Mariano Rajoy. No es la única, desde luego. Falta le hacía a España, después de ocho años de incompetencia.

José María Lassalle / Secretario de Estado de Cultura; por C. David Carrón
Para constatar que es un hombre de centro, basta con señalar que comparte disputas conyugales con una diputada del PSC. Su extensa formación económica salió a relucir hace unos meses con la publicación de su libro «Liberales». Unos conocimientos que no olvida para el área del que se ocupa, pues cree en la lengua española como fuente de riqueza. Su voluntad de consenso será fundamental para desarrollar la «Ley Antipiratería» que él mismo retocó y para convencer al sector de que las desgravaciones fiscales de la «Ley de Mecenazgo» que viene impulsando desde hace meses serán más provechosas que las subvenciones para lograr que la industria cultural sea competitiva. 

Antonio Beteta / Secretario de Estado de Administraciones Públicas; por David Pérez
Quienes hemos tenido el honor de trabajar con Antonio Beteta coincidiremos en destacar su experiencia, su paciencia y su solidez. Persona laboriosa y metódica, comprometida con Madrid y con España, fiel defensor de la libertad y con una escala de valores ordenada en la que su hijo y su familia ocupan un lugar primordial. Un papel que ilustra la profunda humanidad de Antonio, un hombre tan inseparable de su pipa como de sus principios. Su eficacia, su experiencia, su compromiso de servicio, sus valores y su humanidad convierten en definitiva a Antonio Beteta en la persona perfecta para desempeñar tan alta responsabilidad al servicio de España.