Japón
«‘Corteo' es el ‘show' más complicado de la compañía»
Hablar del «Cirque du Soleil» es hablar de la magia en su estado más puro. Hasta el 17 de julio, los valencianos podrán disfrutar de «Corteo» (cortejo en italiano), el impresionante espectáculo que la compañía canadiense estrenó ayer en Valencia. El director artístico de la obra, Bruce Mather, da las pistas del que está llamado a ser uno de los «shows» más impactantes de los últimos tiempos.
– ¿Qué va a encontrar el público valenciano en «Corteo?
– En Valencia son muy fans de la compañía. Lo que van a encontrar es el «Cirque du Soleil», pero no el «Cirque du Soleil» de siempre. Lo que caracteriza este espectáculo es que la pista está en mitad de la carpa. Aparte de dar la sensación de un espejo, eso significa que el asiento más lejano del escenario está todavía muy cerca. De esta forma el público puede estar más cerca de la acción, y esto les agrada mucho.
–«Corteo» estará en Valencia hasta el 17 de julio. ¿Qué es lo que le diferencia de otros espectáculos del «Cirque du Soleil»?
–Es un espectáculo más teatral y los artistas han tenido que aprender español. Aunque lleva de gira seis años, las canciones se han traducido. Es la primera vez que el público va a poder entender la letra. Hemos conseguido que los actores principales hablen en castellano, hasta uno de los artistas, que hace de maestro de ceremonias y que viene del sur de los EE.UU. ha conseguido aprender la lengua, aunque le ha costado mucho.
–¿De dónde surge la idea de recrear la historia de un payaso que sueña con su propio funeral?
–La idea es de Daniele Finzi Pasca, director de un circo italiano. Él quería hacer un espectáculo con el «Cirque du Soleil». Quería ejemplificar el sueño de este payaso y de su propio funeral. Y las cosas que ocurren en un sueño no son lógicas, están desordenadas, pero son bonitas. Y con esta obra el quería recordar los acontecimientos agradables de su vida en el circo, de su infancia y de sus amigos.
– La obra sirve de nexo de unión entre el cielo y la tierra, un hecho que va a sorprender a los espectadores.
–Como las cosas transcurren entre el cielo y la tierra, somos el espectáculo más complicado de todo el «Cirque du Soleil». Al desarrollar la acción en este cielo, es necesario un buen equipo técnico. Todo es preciso. Si falla cualquier cosa, se produce el efecto dominó. Es muy complicado hacer un espectáculo de este calibre, pero creo que el resultado vale la pena. Además, hay una especie de mundo intermedio que no es ni cielo ni tierra, y que va a sorprender mucho.
–¿Cuál es la receta del éxito del «Cirque du Soleil»?
–No hay fórmula mágica. Es ser consciente de que la compañía tiene que evolucionar. La gente quiere cosas diferentes. Este espectáculo no es el mismo que hace seis años. Nos permite el lujo de variar algunos aspectos, pero sin modificar la idea original.
–¿Qué le diría al público para que se acerque a vivir la experiencia que encierra «Corteo»?
– Yo les pido que griten, que se rían, que aplaudan. Es una experiencia que no van a olvidar. Además, los artistas agredecen estar en España. «Corteo» viene de girar por Rusia y Japón, y allí el público no es como el español. Aquí la gente se ríe y aplaude, y eso es una recompensa para el trabajo de toda la compañía.
«A veces hago de papá y de mamá»
Bruce Mather se muestra satisfecho con el trabajo de sus artistas. Aunque asegura que «soy los ojos y los oídos» del espectáculo, su implicación es tal que lo revisa cada noche. Además, entre risas confiesa que, en ocasiones, «hago de papá y mamá a la vez», ya que los artistas quieren hablar, explicar sus sueños y sus penas y «yo estoy para escucharles». Lo que si es cierto, es que el «Cirque du Soleil» es una gran familia.
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