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«No tiene problemas de visión Tenga su certificado»

El certificado médico para la renovación del permiso de conducir es un mero trámite; un papel por el que hay que pagar 40 euros y sin el cual es imposible acudir a Tráfico para tramitar dicha renovación. Pero no hay que temer los resultados porque lo importante no es ser o no apto para llevar un vehículo, lo imprescindible es disponer de los 40 euros.

Una mujer, ayer, espera en un centro de reconocimiento madrileño obtener el certificado que le permita renovar el permiso de conducir
Una mujer, ayer, espera en un centro de reconocimiento madrileño obtener el certificado que le permita renovar el permiso de conducirlarazon

Lo ha denunciado la Fiscalía y LA RAZÓN ha podido constatar que es así: existe el fraude en los Centros de Reconocimiento de Conductores. Una redactora de este periódico se dirigió a uno de ellos con la intención de renovar su permiso de conducir. Dos personas esperaban en un pequeño despacho y uno de ellos le preguntó: «¿Utiliza usted gafas?», a lo que ella respondió que sí, pero sólo para trabajar ante el ordenador, leer... debido al astigmatismo. «Entonces, usted ve bien las señales y los indicadores en la carretera ¿no?». «Sí, sí, perfectamente».

La redactora pensaba que a continuación le harían una revisión óptica en alguna sala contigua, pero no fue así. La otra persona tomó un papel y fue preguntándole si padecía alguna enfermedad grave, alguna dolencia cardiaca... Y, fiándose en todo momento de las respuestas que le daba la periodista, rellenó el informe.

«Ya está. ¿Va a tramitarlo usted misma en Tráfico o prefiere que lo hagamos nosotros?». «Pensaba hacerlo yo pero si pueden hacerlo ustedes...» «Sí, claro, además no le vamos a cobrar más que los 22,22 euros que cobra Tráfico, nuestra gestión es gratis». Desde luego, es perfecto, todo son facilidades. Pero la periodista no llevaba fotos, tenía que volver otro día. «No se preocupe, las hacemos aquí», le dijeron y uno de ellos sacó una máquina fotográfica y señaló una pared con un fondo blanco.

Todo estaba preparado y, en una habitación de unos siete metros cuadrados se consigue la renovación del permiso. Bueno, queda pagar las fotos, claro.