Cesc se olvida de Messi

GNIEWINO- «Nunca me he comparado con Messi. Es una tontería», afirma Cesc. Leo es el modelo, el 9 mentiroso con el que el Barça de Guardiola ha ganado varias veces todos los títulos. «Juego donde me pone el míster y ya está», insiste el centrocampista azulgrana, bastante enfadado por la comparación con su compañero de equipo. «No tenemos por qué hablar de Leo porque no está aquí, no es un jugador de la Selección. Es el mejor jugador del mundo y no se me puede pedir que haga lo que hace él, que regatee a cuatro y, además, la meta por la escuadra», dice el internacional español.
Él, que empieza a acostumbrarse a esa posición de 9 falso, aporta otras cosas, los valores que le pide Del Bosque y que no le ofrece un delantero centro clásico. «Me gusta jugar ahí porque tengo más libertad», explica. «Puedo llegar arriba, dar el último pase o aguantar la pelota para que lleguen mis compañeros», continúa.
Desde esa posición que, como el seleccionador se esfuerza en explicar, no es nueva para él, Fábregas ha conseguido marcar dos goles en los cuatro partidos que ha disputado en el torneo, aunque sólo en dos fue titular. Números mucho mejores que los logrados con el Barça desde que comenzó 2012. Tras un buen comienzo, su rendimiento se estancó con el cambio de año y en los 16 partidos de Liga que jugó desde enero sólo fue capaz de marcar un gol a pesar de ser titular en trece de ellos.
No es extraño, después de ver esas cifras, que el propio Fàbregas se sorprendiera de verse como titular en el estreno contra Italia. Aunque la costumbre de ser titular se adquiere pronto y le sentó bastante mal que Del Bosque lo dejara en el banquillo contra Irlanda. Para el seleccionador, Cesc ya es un delantero. «No existen las verdades absolutas, también nosotros tenemos un debate interno», asegura cuando se le cuestiona sobre el falso 9. «Pero Cesc nos da continuidad en el juego, que es lo que buscamos», concluye.