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Circunstancias de ZP

La Razón
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Escucho con frecuencia en los últimos días muchas afirmaciones, no exentas de críticas, sobre la metamorfosis que ha sufrido Zapatero en su ideología y en sus actitudes. Nada más lejos de la realidad. Nuestro presidente del Gobierno no ha cambiado, lo que ha cambiado es el mundo y él lo único que hace es adecuarse a las nuevas circunstancias, aunque eso suponga la renunciar a sus principios ideológicos más importantes. No somos conscientes del gran sacrificio que nuestro presidente está haciendo por España y por los españoles. En resumen, que somos unos desagradecidos de tomo y lomo. Nunca agradeceremos lo suficiente que Zapatero Presidente (ZP) se haya transformado en el Presidente Zapatero (PZ) y haya acometido una serie de cambios, que están suponiendo un significativo recorte de los derechos sociales, esos que para él eran sagrados. Creo recordar, aunque vagamente, que dijo en alguna ocasión que nunca habría recortes sociales mientras él estuviese al frente del Ejecutivo. Pero las circunstancias mandan y obligan. También fue, qué tiempos aquellos, el más firme bastión del «no a la guerra». Una de sus primeras decisiones consistió en retirarnos de Irak con el rabo entre las piernas. Sin embargo, luego, otra vez las circunstancias, se puso a enviar soldados españoles fuera de nuestras fronteras y ha terminado en esa coalición que está interviniendo en la guerra de Libia, aunque no se sabe muy bien bajo qué paraguas y bajo qué mando, porque los aliados son menos aliados que nunca. Eso sí, él, es decir Zapatero, se resiste a emplear la palabra «guerra», tal y como destacaba ayer la portada de LA RAZÓN. Y es que reconocer eso, que es una guerra, sería mucho cambio y metamorfosis.