Elecciones europeas

Queda algo del PSOE

La Razón
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Como siempre ocurre cuando el PSOE se da el tortazo electoral, los datos suelen ralentizarse, congelarse y aplazarse hasta lo imposible. Es la noche donde las calculadoras echan humo, como ocurrió tras el cierre de los colegios electorales en la jornada de ayer. Estábamos al filo de las diez de la noche y los datos sobre participación y tendencia electoral seguían bailando como si se tratara de un karaoke. Lo que sí se apreciaba, y esa es la clave de todo, era un claro y contundente ascenso del PP en la práctica mayoría de los municipios murcianos, así como en la Asamblea. Pero lo más sorprendente de todo, y ya lo anunciamos desde estas mismas páginas, es que la debacle que sufre el PSRM es con cargo a su propio electorado, hasta el extremo de que la suma de los concejales de los partidos hasta ahora inexistentes supera a la del propio PSOE. No se convierte en un partido extraparlamentario de milagro, aunque bien cerca anda de ello. El PSOE está obligado a exorcizar su propia esencia, que no cuadra para nada con el sentir de los votantes de la Región, y eso empieza por la cabeza, es decir por el liderazgo. Se veía venir, incluso lo veían venir los propios socialistas, pero nadie hizo nada para evitar el hundimiento. Le toca al PSOE llevar a cabo su propia catarsis si quiere salir del agujero negro en el que se encuentra y si quiere evitar el extraparlamentarismo que se le avecina si no pone en marcha una cirujía que tapone la hemorragia interna. A los vencedores hay que felicitarles y pedirles generosidad en la administración del éxito y mano tendida a lo que queda del PSOE.