Rato y otros 23 cargos públicos desfilarán por el Congreso

MADRID- Con luz y taquígrafos, ante la Comisión de Economía y antes de que concluya el mes de julio. El PP dio ayer un giro de 380 grados a su discurso y estrategia sobre el «caso Bankia» después de registrar la petición de comparecencia de Rodrigo Rato y otros 23 cargos públicos y financieros del país. Todos ellos desfilarán por el Congreso para explicar los detalles del agujero en las cajas de ahorro, y en especial, los de la cuarta entidad bancaria del país antes de su nacionalización. Lo anunció ayer en rueda de prensa el portavoz del PP, Alfonso Alonso, quien aseguró que las comparecencias serán todas a puerta abierta porque el objetivo es analizar y saber qué ha ocurrido en nuestro sistema financiero en los últimos años.

«Lavar su imagen»
La imputación de Rodrigo Rato en la querella presentada por UPyD ante la Audiencia Nacional y la petición en la mañana de ayer del propio ex presidente Bankia para acudir al Congreso «cuanto antes» a dar explicaciones para «lavar su imagen» ha precipitado, sin duda, el cambio en la estrategia del Grupo Popular, que hasta ahora había bloqueado todas las peticiones de comparecencia solicitadas por la oposición.

El caso es que ahora la mayoría del PP obligará a desfilar por las Cortes Generales a los ex vicepresidentes socialistas Pedro Solbes y Elena Salgado, pero también al propio ministro de Economía, Luis de Guindos o al nuevo responsable de Bankia, Ignacio Goirigolzarri. Uno tras otro, 24 altos cargos políticos y de gestión en las cajas pasarán por la Comisión de Economía -cuyas sesiones se celebrarán a puerta abierta- y no por la del FROB, cuyas reuniones son a puerta cerrada y donde hasta ahora el PP había remitido todas las explicaciones sobre Bakia. El popular Alonso abrió la puerta a que el «desfile» comience de inmediato e incluso a que el primero en pasar por la Comisión de Economía antes de que concluya julio sea Rodrigo Rato, ya que él mismo ha mostrado su deseo de que así sea. Pero la intención del PP es que por sede parlamentaria pasen también los principales dirigentes económicos de la etapa socialista.
Además de Solbes y Salgado, acudirán el ex secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa; el ex gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez y el número dos del órgano regulador, Francisco Javier Aríztegui. La lista se amplía con el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Julio Segura, y su vicepresidente, Fernando Restoy. Los «populares» incluyen asimismo en su petición a todos los responsables de las demás entidades intervenidas: Caixa Catalunya, Novacaixagalicia, Novagalicia Banco, Caja Castilla-La Mancha (CCM), Caja Sur, Caja del Mediterráneo, Unimm y Banco de Valencia.

Entre toda la retahíla de nombres, hay uno que no figura en la lista, el del antecesor de Rato en Caja Madrid, Miguel Blesa, un nombre en el que reparó el PSOE de inmediato. Y es que los socialistas consideran que Blesa, al que Soraya Rodríguez se refirió como «el hombre de Aznar en Caja Madrid» fue el presidente de la entidad durante los años de la burbuja inmobiliaria, y por tanto, del orígen del agujero que hoy tiene la entidad. Los socialistas esperan que la ausencia de Blesa de la lista de comparecientes presentada por el grupo popular no se deba a «presiones políticas». No parece.

El agujero de Banco de Valencia
El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) considera que algunos de los ex directivos del Banco de Valencia pudieron provocar un agujero en la entidad cercano a los 137 millones de euros, por lo que solicita el embargo cautelar de las cuentas bancarias y bienes de todos los denunciados. Según la denuncia presentada por los actuales gestores del Banco de Valencia, intervenida por el Banco de España en 2011, los ex directivos de la entidad deben responder por la responsabilidad civil que se ha derivado de los delitos de los que se les acusa: estafa, administración desleal y apropiación indebida. La denuncia se dirige, principalmente, contra el exconsejero delegado del Banco de Valencia Domingo Parra, contra su socio Aurelio Izquierdo y contra el empresario Eugenio Calabuig.