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Río de Janeiro

Siete muertos más en la operación contra bandas criminales de Río

Otras siete personas murieron hoy en los enfrentamientos que desde el lunes se registran en Río de Janeiro entre bandas armadas y la policía, lo que eleva a 30 el número de fallecidos en esta última ola de violencia, informaron fuentes oficiales.

El choque se produjo en la favela de Jacarezinho, una barriada pobre en la zona norte de Río controlada por narcotraficantes. En la operación participaron cerca de 200 agentes.

La cifra de víctimas aún puede aumentar debido a los enfrentamientos que se registran en Vila Cruzeiro, considerada la favela más peligrosa de la ciudad, que esta mañana fue ocupada por tropas de elite de la policía militarizada con el apoyo de seis tanquetas blindadas cedidas por la Marina de Guerra.

La ocupación fue transmitida en directo por las cadenas de televisión y, aunque hay informes de numerosos enfrentamientos, hasta ahora no hay información de víctimas mortales.

La intensa movilización policial, por la que se ha doblado el número de uniformados en las calles y llevado a cabo operaciones en 28 favelas, busca reprimir a la organización criminal a la que se atribuyen los ataques violentos de los últimos días.

Las autoridades de Río de Janeiro, que será una de las subsedes del Mundial de Fútbol de 2014 y la sede de los Juegos Olímpicos de 2016, han atribuido los ataques a una represalia de los bandas que fueron expulsados por la policía de importantes favelas en las que controlaban el tráfico de drogas.

Según la secretaría de Seguridad Pública de Río de Janeiro, estos narcotraficantes expulsados, que integran el llamado Comando Vermelho (Comando Rojo), la principal organización criminal de Río de Janeiro, se han concentrado en Vila Cruzeiro y otras favelas del Complejo del Alemán, un conjunto de barrios pobres en la zona norte de la ciudad.

Según el último boletín divulgado por la Policía Militarizada, los enfrentamientos entre uniformados y narcotraficantes desde el lunes han dejado además 47 detenidos y dos policías heridos.

En los cuatro días de combates, en los que los pistoleros han quemado 55 vehículos, la policía ha decomisado 29 pistolas y revólveres, 10 fusiles, dos escopetas, una submetralladora, cinco granadas, dos bombas caseras, un cóctel molotov y nueve artefactos explosivos.