Un obispo «resistente» y «sufrido» para Cataluña

MADRID- Salvador Cristau, vicario general de Terrassa y rector de su bien nutrido seminario, ha sido nombrado obispo auxiliar de esta diócesis barcelonesa, que cuenta con casi 1,4 millones de habitantes, la décima más poblada de España. El cardenal de Barcelona, Lluís Martínez Sis tach, lo ha felicitado recordando la época en que ambos, en la parroquia de la Virgen de Montserrat del barrio de Guinardó, ayudaban a mosén Jordi Jorba, hoy misionero en Chile. José Ángel Sáiz, obispo de Terrassa, explica a LA RAZÓN que, en Cristau, aprecia «su profunda espiritualidad, su probada fidelidad, que está bien equipado intelectualmente, que transmite serenidad y que, a la vez, es resistente en situaciones difíciles». Un párroco del Montseny explica a este diario que Cristau «es muy sufrido y puede aguantar mucho sin desanimarse, tiene fortaleza y constancia». El nuevo obispo admite a LA RAZÓN que «es cierto que creo que la constancia es buena, que no vale entusiasmarse y apagarse como un cohete». Le atrae «el reto de la nueva evangelización». En Barcelona y Terrassa ha formado a un centenar de sacerdotes a los que ofrece su programa: «vivir en el presente, entregarnos, ir y predicar».