Nadal un calvario

Federer cometió dos errores al eliminar a Djokovic: le evitó a Nadal el sufrimiento de las últimas finales y se cargó él con el drama de enfrentarse al campeón español. Para Federer, las finales contra el mallorquín se han convertido en un calvario. Tuvo a Nadal contra las cuerdas en el primer set con 2-5 e incomprensiblemente perdió 7-5. Derrochó siete juegos seguidos y ello acabó por definir la final. Los esfuerzos que hizo en el tercer set sólo prolongaron su sufrimiento.
Otra cosa no debe ser para el suizo tener enfrente al manacorense. Un gran campeón como él comete las torpezas impropias de quien atesora un historial como el suyo. Contra Nadal pierde la concentración y hay minutos en que se deja ir. Solamente cuando lo ve todo perdido se desprende del estrés y ofrece las maravillas de su juego.
Nadal supo explotar la ventaja que le ofreció Federer con el incierto revés. Le atacó ese golpe y fue encontrando ventajas. Jugándole así le obligó a correr mucho más buscando la derecha. De haber llegado al quinto set, probablemente habría terminado vencido y humillado porque le habría costado resistir físicamente.
Nadal no sólo vence al suizo técnica y tácticamente, sino que, además, hace tiempo que psicológicamente le ganó la partida y ello le otorga más ventaja. Federer ha debido perder la esperanza de ganar a Nadal. La fórmula para ello es un arcano y no lo encuentra.